Shkodran Mustafi ya es un valencianista más en la concentración de Marlow, la pequeña localidad residencial bañada por un tramo tranquilo del Támesis con varios clubes de piragüismo y en la que los blanquinegros continuarán esta semana con su preparación de la pretemporada. El defensa alemán fue el foco de atracción ayer en la llegada. Hasta el policía del control fronterizo del aeropuerto de Gatwick, seguidor confeso del Arsenal, le interrogó entre risas sobre su futuro. En el horizonte, dos partidos de exigencia Premier ante el Bournemouth (miércoles) y el Crystal Palace (sábado) que examinarán la solidez de un proyecto que, a tres semanas de empezar la Liga, aún está llamado a sufrir grandes transformaciones estructurales que pueden afectar a algunos de sus principales jugadores.

El caso Parejo sigue abierto, en carne viva, y sin visos de una resolución a corto plazo. Y, aunque con menos efervescencia, también se está pendiente de qué pasará con el futuro de Mustafi. El central alemán tiene pendiente una conversación con Ayestarán para comprobar con qué expectativas ha regresado de las vacaciones. A nadie escapa que el defensa internacional germano está en la agenda de clubes de primera línea europea. Para el Valencia es una pieza clave pero será el mercado el que marque sus reglas y tampoco cabe ignorar que el club de Mestalla todavía tiene un diferencial negativo en el «juego limpio financiero» supervisado por La Liga.

Ayer se pudo ver a Mustafi sonriente y relajado, atendiendo en Manises las peticiones de los aficionados que se marchaban de vacaciones, antes de partir en vuelo regular de bajo coste hacia Gatwick. El Valencia no descarta desde hace meses que vengan ofertas de calibre de la Premier „ha sonado el Arsenal„ aunque la mayor insistencia de momento se ha manifestado en la liga italiana, en la que Mustafi conserva un buen cartel de sus días en la Sampdoria.

Precisamente, una delegación de uno de los clubes que ha preguntado por Mustafi, la Juventus, coincidió con los blanquinegros en Manises. El conjunto piamontés había jugado el día anterior en China. En una de las cafeterías, separados por pocas mesas, Mustafi se sentó junto a varios empleados valencianistas y fue Guilherme Siqueira quien se atrevió a charlar con su buen amigo y compatriota Neto, portero suplente de Gigi Buffon en la «vecchia signora». Con caras de cansancio, Pjanic, Dybala, Pereyra y Benatia completaban la representación juventina que no paraba en Valencia para disputar ningún bolo de verano... sino para enlazar con Ibiza, donde descansarán un par de días.

Por lo demás, Marlow recibió al Valencia con una temperatura agradable (20 grados de máxima) y se espera que a lo largo de los próximos días llueva. Una circunstancia acogida con agrado en la expedición, tras un primer tramo de pretemporada marcado por el calor y la humedad tanto en Valencia como en el «stage» de Holanda.

A las 20.40 horas apareció el grueso del grupo, encabezado por Layhoon, y el cuerpo técnico. Volaron directamente desde Finlandia para integrarse en la pequeña localidad de Marlow. El miércoles se unirá el portugués Nani.