Prandelli solo tenía que hacer un simple ejercicio de comparación. Delanteros del Atlético: Gameiro, Griezmann y Torres. Delanteros del Valencia: ninguno. Desde el palco de Mestalla, el nuevo entrenador del Valencia, Cesare Prandelli, pudo observar claramente las carencias en su nuevo equipo: falta un seis y falta un 9. Sin ellos, el Valencia no puede competir hoy en día con un Atlético tan poderoso como este. El cuadro de Simeone ganó 0-2 y falló dos penaltis. No hay más preguntas, señoría. Y eso que el equipo de Voro se dejó el alma en el intento, como reconoció el público al final del encuentro. Pero no hay más y habrá que esperar al mercado invernal para remediarlo. tristemente.

Diego Alves encendió Mestalla con un paradón de época a un penalti de Griezmann al borde del descanso. El tiro, potente y a media altura, exigía una intervención llena de energía, intución y técnica. Todo eso lo tuvo Alves, que voló hacia su derecha y, en pleno vuelo, sacó la manopla izquierda, a mano cambiada, para despejar. La sanción del árbitro, Clos Gómez, venía por un empujoncito de Nani a Correa en el segundo palo.

La grada despidió en el descanso a su portero como una ovación sentida y cerrada. El meta internacional brasileño había permitido que el público abrazara el empate ante un Atlético que, en determinadas fases, había mostrado una superioridad aplastante.

El Valencia trató de competir con valentía, que ya es mucho tratándose del rival colchonero. Aferrado a la habilidad de Nani para enseñar las garras valencianistas en los mano a mano con Correa y Juanfran. El interior portugués es el jugador más desequilibrante del Valencia. El cuadro de Voro, sin embargo, sigue sufriendo la ausencia de un goleador, por mucho que Rodrigo lo intente (no es su sitio ni su fuerte). Nani y Parejo, excelente en la media punta, fueron las mayores amenazas para un Atlético solidísimo, como se preveía.

"Gràcies, Voro; nuestro señor Lobo". El homenaje a Pulp Fiction de la grada de Mestalla enseñaba a su vez el agradecimiento de Mestalla con el técnico de L´Alcúdia.

Parejo se escapó de una emboscada de cuatro rojiblancos en una jugada fabulosa en el arranque de la segunda parte.

Pero reaccionó Simeone y sus cambios (entraron Carrasco y Torres) entraron en acción en seguida. Carrasco se escapó de Montoya, sirvió a Torres y, en su primera toma de contacto con el balón, disparó cruzado. La gran parada de Alves no sirvió de nada. Griezmann recogió el rechace y reventó las redes. El partido parecía sentenciado cuando Mario Suárez cometió un penalti muy torpe sobre Griezman. Se disponía Gaby (ya no se atrevió el propio Griezmann) a rematar el encuentro cuando surgió de nuevo gigantesca la figura de Alves, esta vez raso y a su izquierda. Mestalla volvió a meter a su equipo en el partido. La entrada de Bakkali le dio desparpajo y profundidad por la banda derecha. Y un centro cabeceado picado por Mangala (que se había quedado arriba, lesionado) a punto estuvo de suponer el gol del cojo. No tuvo esa suerte el Valencia, golpeado al final por otra contra supersónica de Gameiro.

VALENCIA. Diego Alves; Montoya, Aderlán Santos, Mangala, Gayà; Cancelo (Santi Mina, m. 46), Mario Suárez, Enzo Pérez, Parejo, Nani Bakkali, m. 79); y Rodrigo (Munir, m. 67).

ATLÉTICO. Oblak; Juanfran, Savic, Lucas, Filipe Luis; Gabi, Saúl (Carrasco, m. 57),Koke; Correa (Torres, m. 62), Gameiro y Griezmann (Tiago, m. 79).

GOLES. 0-1. M. 63. Griezmann. 0-2. M. 93. Gameiro

ÁRBITRO: Clos Gómez.

TARJETAS AMARILLAS: Filipe Luis, Griezmann, Mangala, Tiago,

TARJETAS ROJAS: No hubo.

ESTADIO: Unos 55.000 espectadores en Mestalla.