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Análisis

Mucha diferencia

La voluntad no le basta al Valencia para hacer frente a un Atlético más formado y con más calidad - Prandelli puede mejorar el equipo, no los jugadores

Mucha diferencia

Los equipos llegaban con trayectorias ascendentes, pero el Atlético está hoy en día por encima del Valencia. Quedó claro ayer en Mestalla. Mientras el conjunto blanquinegro trata de salir de la zona de abajo, el de Simeone sigue firme en su objetivo de estar arriba en la clasificación. Uno está en proceso de construcción, pese a las dos victorias anteriores, y el otro está mucho más hecho.

Planteamiento coherente

El partido comenzó un planteamiento muy coherente por parte de Voro, teniendo en cuenta los jugadores de que dispone y la distancia que ahora mismo hay entre los dos equipos. Voro agrupó a sus jugadores cerca del área, para intentar que no hubiese espacios entre líneas y dejar más espacios en las bandas. Es lógico, ya que a los centros al área debía responder el mayor poderío aéreo de Aderlan y Mangala ante los delanteros atléticos. Es evidente que eso es lo que quería el técnico: evitar esos pases interiores. Pero con la calidad del Atlético, era inevitable que a veces los encontrasen. Así llegaron las primeras ocasiones, como la de Saúl a poco de empezar, o el tiro de Griezmann fuera del área.

Desbocados al ataque

El Valencia salía hacia adelante cuando podía, pero tenía que recorrer demasiados metros porque estaba muy cerca de su área. En ese momento, se vieron detalles de calidad de Nani y se notaba el peso específico de Enzo Pérez en el equipo. Pero el Atlético estaba mejor asentado en el campo. Llegó la primera jugada que pudo ser clave, el penalti dudoso que terminó con la demostración de Diego Alves en los penaltis. A veces no damos tanta importancia a los porteros, pero esa parada ante Griezmann se puede interpretar com un gol de un gran delantero. La acción permitió al Valencia irse al descanso vivo con el empate.

Ajustando las marcas

En la segunda parte, no tardó mucho en llegar el mazazo del 0-1. Al final, estaba claro que tarde o temprano, el dominio del Atlético tenía que fructificar. Simeone había realizado ya dos cambios ofensivos con las salidas de Carrasco y Fernando Torres . El primer balón que tocó Torres terminó en gol. Los jugadores del Valencia estaban ajustando todavía las marcas, Carrasco se fue de Montoya, el balón llega a Torres y el rechace terminó en las botas de Griezmann, que estuvo infalible en el remate.

Con 0-1, el Atlético siguió un rato sin renunciar a la pelota. Todo parecía perdido cuando Clos Gómez señaló el segundo penalti. Otra vez, Alves demostró que es el mejor en la especialidad. El Atlético cambió el lanzador y esta vez el brasileño se lo paró a Gabi.

Los problemas físicos

A partir de ahí, el Valencia tuvo más el balón. Pero se le complicaban las cosas, ya que varios jugadores tenían problemas físicos. Mangala, cojeando, terminó jugando arriba y disfrutó de una ocasión, de cabeza, para empatar. La otra opción, también por alto, fue de Santi Mina. Pero al final llegó otro contraataque del Atlético de Madrid, en el que demostró que tiene mucha más velocidad que los defensas del Valencia. Gameiro se fue como un rayo y batió claramente a Alves.

En definitiva, la victoria del Atlético no se puede discutir. Podemos decir que el Valencia mostró mucha voluntad, pero no eso no es suficiente para doblegar a un equipo de la entidad del Atlético de Madrid.

Que Voro tarde en volver

Es el momento de dar un hasta luego a Voro, que esperemos que tarde en volver a ejercer de entrenador. Eso sería una buena señal, no hay duda. Hay que felicitarle, porque ha sacado al enfermo de la UVI y lo ha subido a planta. Que el equipo salga ya del hospital es una tarea que ya le corresponde a Prandelli. Para eso tiene que leer la plantilla que tiene, sacarle el máximo rendimiento. Si hay que reforzar en invierno, que sea certero en sus elecciones y pueda mejorar a un equipo que ha arrancado muy flojo.

Individualmente, no va a poder mejorar mucho a los jugadores, porque son como son. Tiene más un trabajo de hacer un equipo. Falta solidez defensiva. Arriba parece que hay jugadores que están subiendo su nivel, como Nani. Ahora, los jugadores de peso específico como Parejo, Nani o Garay, son los que deben sentar las bases del Valencia.

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