El Valencia CF exige una indemnización a Cesare Prandelli después de que el entrenador italiano presentara su dimisión como técnico de la primera plantilla el pasado mes de diciembre. El caso de Prandelli ya tiene un precedente en Mestalla. Rafa Benítez tuvo que indemnizar al Valencia CF con 600.000 euros, según desvelaba ayer Onda Cero tras renunciar en 2004 a su año de contrato antes de marcharse al Liverpool.

El Valencia denunció a Rafa Benítez ante Magistratura de Trabajo por incumplimiento de contrato y solicitó una indemnización del Liverpool, como responsable subsidiario. Benítez rompió unilateralmente el contrato que le unía al Valencia y que se prolongaba hasta junio de 2005 y el club entendía que su marcha suponía un perjuicio para la entidad. Lo mismo sucedió con José Mourinho cuando el Chelsea pagó una cantidad al Oporto, con el que el técnico portugués aún tenía contrato en vigor.

En el caso Prandelli, el Valencia también pide una indemnización por romper un contrato que se extendía hasta junio de 2018. El club entiende que el técnico italiano perjudicó a la entidad y debe recompensarla. Ambas partes continúan sin ponerse de acuerdo sobre el finiquito.

Promesas incumplidas

Prandelli se marchó acusando al club de incumplir sus promesas en materia de fichajes: «Me dijeron que iba a ser director deportivo y entrenador. Me han humillado. También me dijeron que Zaza estaba fichado y no lo estaba», afirmó. Paradójicamente, Zaza es jugador del Valencia. Y debutó en Vila-real. Posteriormente, dimitió el exdirector deportivo Jesús García Pitarch.

Según entiende el Valencia, de la misma manera que el club debe indemnizar a un técnico cuando lo destituye, como en los casos de Nuno Espírito Santo, Gary Neville y Pako Ayestarán desde que Peter Lim se hizo con las riendas de la entidad, el contrato también obliga a cumplirse por la otra parte, la del entrenador. Y en el caso de Prandelli se trata de un contrato millonario: más de 2,5 millones de euros limpios por temporada.