El juicio al expresidente del Valencia CF Juan Soler por el presunto intento de secuestro de su sucesor al frente del club valencianista, Vicente Soriano, que iba a celebrarse el próximo jueves se ha tenido que suspender. El motivo es la fuga de uno de los acusados y confidente de la policía, según ha podido saber Levante-EMV de fuentes conocedoras de los hechos.

El fugado, con una orden de búsqueda y captura en vigor, es Rachid B., el que fuera testigo protegido en la investigación por el intento de secuestro entre los dos empresarios, aunque acabó imputado al declarar el expresidente del Valencia CF que fue Rachid quien le propuso secuestrar a Soriano, como la mejor forma para cobrar el dinero que le adeudaba.

Rachid B. alardeaba de colaborar con la Policía en destapar el intento de secuestro, aunque cuenta con numerosos antecedentes policiales. De hecho, fue juzgado en julio de 2015 junto a cuatro personas más en el juzgado de lo Penal número 10 de Valencia de Valencia por dos robos con violencia en casas habitadas, detención ilegal, lesiones y malos tratos a los propietarios de viviendas, ubicadas en Valencia y la Pobla Llarga. También se ha visto implicado en causas judiciales relacionadas con el tráfico de drogas. Un historial que debe haber pesado en su desaparición, por lo que ha sido declarado en búsqueda y captura, ya que debería haber ingresado en prisión por los once años de prisión a los que fue condenado por los asaltos a las viviendas.

Vista retrasada a octubre

La decisión de suspender el juicio a Soler tras la fuga de Rachid B. se adopta para garantizar los derechos de la acusación particular, según explican fuentes conocedoras del proceso. La vista se ha señalado para el próximo mes de octubre. Un plazo lo suficientemente amplio que permitiría poder localizar al confidente fugado.

En el juicio que debía comenzar el 23 de febrero el expresidente del Valencia CF Juan Soler se enfrenta a nueve meses de prisión. La Fiscalía le acusa de planificar el secuestro de su sucesor en el club y empresario, Vicente Soriano, por la deuda de 80 millones de euros que Soler exige tras la frustrada venta de las acciones del club. Junto a Soler se sentarán en el banquillo de los acusados el hostelero italiano Ciro d'Anna, Abdelatif Laaroubi -para los que se solicita la misma pena-, además de Rachid B., el confidente a quien la Fiscalía sólo solicita tres meses de cárcel por estos hechos, tras aplicarle la atenuante de confesión. Rachid B. fue quien advirtió a los agentes de la Jefatura Superior de Policía sobre la planificación del secuestro que desembocó en la detención de Soler en 2011.