El debate ya se ha disparado con el futuro del banquillo del Valencia, uno de los más golosos del mercado europeo. La rumorología apunta a tantas direcciones que ya aparecen hasta exóticas candidaturas como la del croata Robert Prosinecki, actual seleccionador de Azerbaiyán. Las alternativas reales son más concretas. Y Voro González, actual técnico, no está descartado y espera dificultar la decisión final con buenos resultados en las seis jornadas de Liga que restan, con la confianza de que el Valencia se encuentra en el mejor momento del año.

La figura de Voro abre un dilema en el Valencia. La plantilla se postula de forma unánime por su continuidad. Es el entrenador que, en las peores circunstancias, ha sabido llegar y entender al futbolista y, desde esa complicidad, provocar la mejor versión de una gran parte del equipo. Las declaraciones públicas de los futbolistas en los últimos meses han apoyado de manera incondicional al entrenador. Enzo Pérez, del que Voro abortó su marcha en invierno, afirmó «en los ojos» del preparador de l´Alcúdia se nota «su valencianismo». Ezequiel Garay valoró que con Voro «el equipo se siente libre» y los jugadores «queridos y respetados».

Ante ese posicionamiento, el club no ha movido la ficha de forma definitiva, aunque sí hay un planteamiento de salida. La idea del nuevo director general Mateu Alemany es la de incorporar un técnico de un perfil mediático y de experiencia más elevado que el de Voro, de cara a apuntalar el proyecto que devuelva el prestigio deportivo al Valencia. Un camino que ya ha empezado a despejar el propio Voro, con unos números deportivos que avalan el éxito de su regencia. Es ese el motivo por el que el club no quiere dar ningún paso en falso y aguardará a ver qué respuesta ofrece el equipo en las últimas jornadas. Tanto Marcelino García Toral como Quique Setién están bien posicionados en la carrera y, además, entusiasmados con la posibilidad de recalar en el banquillo de Mestalla. El «Toto» Berizzo, preguntado tras el último partido contra el Valencia, no esquivó su gratitud por estar entre los candidatos. Los 18 puntos que quedan en juego, la imagen que se ofrezca en escaparates como el Bernabéu, jugarán en la balanza. Ni Alemany, ni el presidente en ciernes Anil Murthy ni el director deportivo José Ramón Alesanco quisieron perderse ayer la primera sesión de cara al partido en Málaga. Los lesionados Gayà y Abdennour, con una elongación en el muslo izquierdo, no participaron.