Entre ser undécimo clasificado en la Liga o decimotercero puede haber un par de millones de euros en juego por el reparto de los derechos de televisión para el Valencia, pero también está, el próximo domingo ante el Villarreal (16.45) en el último partido de Liga, el prurito de Voro de acabar con tres victorias seguidas y un balance de 13 triunfos de 26 encuentros dirigidos por parte del técnico de L´Alcúdia, justo la mitad. También hay mucho en juego en cuanto a la lista de jugadores que Marcelino, Alesanco y Alemany, con la colaboración de Voro, están elaborando para continuar o invitar a dejar el club de Mestalla.
A bote pronto, la lista de salida se alarga hasta a 10 jugadores, algunos muy obvios y otros no tanto a quienes el VCF tratará de buscar destino siempre y cuando les favorezca el mercado, claro.
Diego Alves vuelve a estar, como en verano pasado, en la rampa de salida. El portero brasileño, camino de los 32 años, ha combinado actuaciones brillantes (sobre todo en los penaltis) con errores de grueso calibre. Y un desencuentro con la grada destapado por el programa El Día Después cuando criticó al público que había abucheado a Cancelo el día que este mandó callar a Mestalla tras marcar ante el Dépor. Su evidente liderazgo en el grupo también ha despertado controversia. Es un portero cotizado por otros clubes y Voro, con la titularidad de Jaume en las dos últimas jornadas, puede haber enviado el mensaje definitivo.
Otro suplente de las últimas citas ha sido Enzo Pérez (y tampoco parece una casualidad). El mediocampista argentino, que quiso marcharse en el mercado de invierno, accedió a quedarse a petición de Voro. Ha contribudo a huir del descenso, pero no ha dado estabilidad a la posición de mediocentro, castigado por entradas a destiempo y por una falta de control en las amonestaciones recibidas.
La irrupción en el puesto de Medrán, que ha jugado al estilo Ander Herrera en el Manchester United (medios de escaso físico que juegan fácil y evitan equivocarse), facilita la transición hasta la llegada de un especialista (tipo Camacho) a expensas de la talla del joven Maksimovic. El problema con Enzo va a ser el alto precio pagado por el VCF (25 millones) y su elevado salario. Casos similares a los de Negredo, Abdennour y Aderlán Santos, los tres muy por debajo de las astronómicas sumas pagadas por ellos (30, 23 y 10 millones, respectivamente).
La marcha más cantada parece la del extremo belga Bakkali, cuya aportación al equipo ha sido exigua en los dos años en Mestalla. Para eso ya está preparado Sito, el extremo zurdo del Mestalla que en Paterna comparan con Vicente Rodríguez, la exestrella valencianista ahora en la secretaría técnica.
Las decisiones son más sencillas en los cedidos con poco rendimiento (Mario Suárez y Siqueira). A Mangala lo ata al City su suculento contrato y Munir se ha quedado a medio camino: se le valora la calidad y los 21 años, pero el precio pactado con el Barça (12 millones) invita a la devolución.
