Con un historial forjado en los equipos clásicos de la Segunda B y Tercera catalana, los Badalona, Sant Andreu, Gramenet o Muntanyesa, Quim Araujo fue reclutado por el Mestalla en el invierno de 2016 para dotar de veteranía a un equipo que luchaba por la permanencia. Sin embargo, la calidad de este centrocampista de 29 años va mucho más allá de un ejercicio de supervivencia. Ayer, en un Mestalla con una fantástica entrada de 17.000 espectadores, Araujo lideró con dos goles y un fútbol de seda la victoria del filial valencianista de Curro Torres, que cobra una ligera ventaja sobre el Murcia en la segunda eliminatoria por el ascenso a Segunda.

El estadio valencianista presenció un partido abierto, un entretenido intercambio de golpes en el que el Murcia, espoleado por la nutrida presencia de 3.000 seguidores, no se escondió en ningún momento. Si bien Rafa Mir tuvo en sus botas la posibilidad del 3-1, también hay que apuntar que Sivera desbarató la posibilidad del 2-2.

Al Mestalla le costó reponerse de la presión agresiva del Murcia en los inicios. El filial se reactivó con la eléctrica actividad por las bandas de Nacho Vidal y Nacho Gil. Los locales se quejaron de la labor arbitral, sobre todo cuando en el minuto 26 el central David Sánchez no fue expulsado por un agarrón a Nacho Gil a pesar de ser el último hombre. En el 36, el capitán Araujo, director de orquesta blanquinegro, marcó de un chut seco que se coló entre las piernas del meta Simón. Sin haber contado con ocasiones claras, Armando empató para el Murcia en el minuto 44 al aprovechar un balón muerto que no blocó Sivera.

La entrada de Alberto Gil por el lesionado Sito acabó siendo decisiva en la segunda mitad. El jugador de refresco inició la jugada desde banda derecha para asistir a Araujo, que definió con un precioso disparo con la derecha, ajustado a la escuadra. El partido entró en su desenlace en un guión abierto e imprevisible, con ocasiones variadas, pero sin llegar a moverse el marcador.