El Valencia CF es segundo en la Liga. Después de dos temporadas horribilis, donde la noticia fue la mediocridad más absoluta, el equipo vuelve a codearse con la aristocracia futbolística del panorama nacional. Esta gran mutación sufrida por el conjunto valencianista tiene un nombre propio, Marcelino, y seis claves en forma de fichajes. Porque el buen rendimiento de los refuerzos de esta temporada es decisivo para explicar el momento dulce de juego, goles y resultados:
Neto
Resultaba difícil de entender que, teniendo a dos porteros de garantías como Diego Alves y Jaume, y el canterano Sivera pisando fuerte desde atrás, el Valencia CF buscara un portero. Pero Marcelino estaba dispuesto a abrir las ventanas del vestuario para que corriera aire y no quería tener al cizaña Alves en la plantilla. Tampoco le tembló el pulso para traspasar a Sivera al Alavés, pese a su recién estrenada internacionalidad con la selección española Sub-21. Neto, del Juventus, fue su apuesta personal. El Valencia CF lo fichó por 7 millones de euros. El brasileño no ha tardado en justificar el porqué de su contratación. Neto transmite seguridad. Esa es su principal virtud.
Murillo
Marcelino tenía muy claro que debía reconstruir al Valencia CF desde la defensa. Y que era urgente firmar dos centrales de empaque para dotar de mayor solidez al eje de la retaguardia. Murillo, del Inter, fue uno de los elegidos. El Inter estaba por la labor de dar salida al colombiano, de forma incomprensible, y el Valencia le planteó al club italiano una compra a plazos para regatear al «Fair Play» financiero. Murillo llegó cedido por dos temporadas, con una opción de compra obligatoria de 11 millones.
Paulista
El brasileño, un viejo conocido del técnico asturiano durante su etapa en el Villarreal, quería salir a toda costa del Arsenal. No se había adaptado al fútbol inglés. Pese a su lesión en la rodilla, Marcelino tuvo muy claro que había que pagar los 12 millones de euros por su fichaje. No había ninguna duda. Y Paulista no ha tardado en volver a cargar de razón al entrenador.
Kondogbia
Un caso similar al de Murillo. Es decir, ¡benditos los ojos! de la dirección deportiva del Inter que permitieron dar salida a un futbolista del potencial del francés, al que Marcelino conocía del Sevilla. Kondogbia llega cedido por una temporada al Valencia CF, con una opción de compra de 25 millones de euros. La presencia de Cancelo en la operación permitió el cambio con el club italiano. El Valencia quiere firmar al futbolista, ampliarle el contrato, e incluso ponerle una cláusula de 100 millones.
Guedes
El visto bueno de Unai Emery tras hablar con Marcelino fue decisivo para que el PSG permitiera la cesión por una temporada del portugués, un futbolista desequilibrante que llegó a París por 25 millones de euros. El Valencia le paga la ficha a Guedes, pero no tiene opción de compra por el jugador. Si quiere su continuidad, lo debe adquirir en propiedad y pujar fuerte.
Pereira
Renovado por el Mancheter United hasta 2019 antes de ser cedido al Valencia CF por una temporada, el club inglés tiene la opción de recuperar a Pereira en enero si paga una cantidad estipulada en el contrato de préstamo. Pereira es el que menos protagonismo ha adquirido de los fichajes, pero ante el Betis, rubricó la goleada.
