Simone Zaza juega en el alambre. El entrenador del Valencia, Marcelino García Toral, ha reconocido que el delantero italiano presenta una "rotura parcial del menisco externo" de la rodilla izquierda. Una dolencia que no se va con descanso, que en algún momento le obligará a ser intervenido, pero que de momento le permite jugar mientras "no se le bloquee" la pierna: "Es una lesión que presenta situaciones de molestia, que perduran en un espacio corto, y a los tres días suele entrenar con normalidad. O puede alargarse en el tiempo y seguir jugando, siempre que no influya en la articulación, o corregir el menisco con una intervención".

Marcelino ha señalado que "nunca tomarán una decisión que ponga en riesgo la salud del futbolista", pero que Zaza estaría en condiciones óptimas de jugar el próximo domingo contra el Espanyol en Cornellà. Asimismo, ha asegurado que no piensa de momento en fichar a un jugador de ataque en el mercado de invierno. Una declaración formal, de puertas hacia afuera, que no cambia el objetivo del club de reforzarse con un delantero del mismo perfil de Zaza.

Cabe recordar que Zaza no jugó ninguno de los dos partidos de la repesca mundialista con Italia al resentirse de las mencionadas molestias.