El Valencia CF de Marcelino sigue haciendo historia. El equipo completó la segunda mejor primera vuelta de la Liga en sus casi cien años gracias a los 40 puntos que le clasifican en tercera posición, con el objetivo de regresar a la Liga de Campeones a la vuelta de la esquina.

Tras un análisis estadístico del rendimiento global del conjunto de Mestalla en el torneo doméstico, su éxito deportivo se explica gracias al equilibrio. Esa es la palabra mágica. La solidez defensiva, unida a la eficacia en ataque, permiten al Valencia disfrutar de una diferencia de +21 entre goles anotados y encajados.

El Valencia CF, invicto hasta la decimocuarta jornada, cerró la primera vuelta del campeonato con una victoria ante el Deportivo en Riazor (1-2), que le permitió sumar 40 puntos por detrás de un Barça intratable (52 puntos) y un Atlético (42) cuya regularidad es su principal virtud.

Esta primera parte de la Liga tan solo es superada por la campaña 2003-20004, en la que con Rafa Benítez en el banquillo, el Valencia se proclamó campeón de Liga tras sumar 43 puntos después de finalizar la primera vuelta.

Pero la mejor noticia del pasado fin de semana fue el colchón de 9 puntos que el Valencia abre con la quinta posición, ocupada por el Villarreal (31), que permite a los de Marcelino alguna que otra licencia de cara al verdadero objetivo del curso que no es otro que clasificarse para la Liga de Campeones.

El Valencia saca 9 puntos al Villarreal, quinto, pero ya aventaja en 11 puntos al sexto clasificado que es el Sevilla. El Madrid es cuarto, con 32 puntos, pero a esos 8 puntos que le sacan los valencianista hay que tener en cuenta que los de Zidane han disputado un partido menos, ante el Leganés, debido a la disputa del Mundial de clubes.

Las cifras del Valencia CF también son espectaculares en lo futbolístico. Los de Marcelino llevan marcados 40 goles, con una diferencia de +21 entre anotados y encajados, que le permiten ser segundos por detrás del Barça (+43) en ese capítulo y hablan bien a las claras de que el equipo navega a velocidad de crucero sorteando cualquier iceberg.

Este Valencia de Marcelino también es el segundo equipo de la historia que suma más goles, por detrás del que disputó la campaña 1954-1955 con Iturraspe en el banquillo, que anotó la friolera de 43 tantos en tan solo 15 partidos.

En cuanto a los goles encajados, el Valencia CF no presenta una estadística desfavorable (19 en contra), pero bien es cierto que hay margen de mejora. Aquí radica el plus de rendimiento que hay que pulir de cara a la segunda vuelta. Porque el Valencia es sexto en este capítulo, por detrás de Atlético (8) y Barça (9), que resultan inalcanzables, pero con peor coeficiente que el Leganés (14), Madrid (17) y Getafe (18), conjuntos todos ellos en los que prima lo defensivo. El verdadero reto de Marcelino en la segunda vuelta no es otro que volver a poner el cerrojo en la portería de Neto.