Se cumplen 20 años de la remontada que significó un giro histórico en la trayectoria del Valencia CF. El 19 de enero de 1998, el equipo entonces entrenado por Claudio Ranieri ganaba 3-4 en el Camp Nou contra el FC Barcelona. Un triunfo cosechado en los últimos veinte minutos de juego y después de levantar el 3-0 desfavorable y que resultó ser un punto de inflexión en el rendimiento de los blanquinegros, en la antesala de la época dorada que se iniciaría a partir de 1999. Aquel encuentro significó, además, el comienzo de la leyenda protagonizada por Claudio "El Piojo" López, cada vez que se enfrentaba al Barcelona de Louis Van Gaal.

El Valencia alineó a Zubizarreta, Angloma, Carboni, Djukic, Cáceres, Soria, Milla, Mendieta, Farinós, Ilie y Claudio López. Con un Camp Nou con menos de media entrada, en un lunes de frío invierno, el Barcelona se puso por delante con relativa facilidad y encarrilando en los primeros 55 minutos de juego el partido con los tantos de Luis Enrique, Rivaldo y Cáceres, en propia puerta. El Valencia se encontraba entonces en plena reconstrucción. Claudio Ranieri había descartado a los fichajes estelares que habían iniciado el proyecto de esa temporada, con Jorge Valdano como técnico y Romario, Moussa Saïb o Marcelinho Carioca como referentes, y había rescatado del ostracismo a jóvenes como Claudio López y Gaizka Mendieta con los que aspiraba a perfilar un equipo más directo, con alma de contragolpe. Todo ello apoyado sobre la base de veteranía de jugadores como Angloma, Djukic, Carboni o Milla, contratados el verano anterior a coste cero.

Con el partido perdido, Ranieri introdujo cambios que revolucionarían el partido. Ortega Morigi y Juanfran intervendrían en todos los goles. En el minuto 70 Claudio López cedía a Morigi, que marcaba de tiro cruzado en semifallo. Ya se había abierto la grieta. En el 75 Juanfran centraba desde la banda izquierda y Claudio López picaba de cabeza a gol. En el minuto 89 se obraba el empate, al empalar Claudio López un despeje fallido de Bogarde con el que fusiló a Hesp.

El 3-3 ya parecía en sí un milagro. Con la realización televisiva de Antena 3 recreándose todavía en las repeticiones del último gol, Ariel "El Burrito" Ortega robaba la pelota y encaraba en solitario a Hesp, batiéndole con un gran disparo ¡3-4! En su último partido destacable como valencianista, el mediapunta argentino celebró el tanto quitándose la camiseta, lo que le valió la expulsión, ante la incredulidad de un Camp Nou helado.

Se había consumado un triunfo sonado, de prestigio. Todo un golpe en la mesa que anticipa el regreso, por todo lo alto, del Valencia CF a la élite. "Gesta histórica del Valencia en el Camp Nou", titulaba en grandes caracteres Levante-EMV. "La noche más hermosa", recreaba la crónica de Moisés Domínguez. Aquella temporada, la 1997-98, el Valencia no lograba concretar los objetivos fijados, fuera de Europa y obligado a apuntarse a la Copa Intertoto. No obstante, ya se había armado el bloque del que vendrían los éxitos de la época de oro entre 1999 y 2004. Lo mejor estaba por venir, con dos ligas, una Copa del Rey, una Copa de la UEFA, una Supercopa de Europa y dos finales perdidas de Liga de Campeones, todo concentrado en los siguientes cinco años y medio. Una edad de oro que no se puede entender sin ese milagroso 3-4 de hace justo veinte años en el Camp Nou.