Mateu Alemany tiene muy claro que si algún club quiere pescar en el Valencia, debe pagar caro. Por este motivo, el director general sigue citando a jugadores para revisarles el contrato y subirles la cláusula de rescisión hasta cifras de mercado. Tras ampliar el contrato a Ferran Torres, que renovó hasta 2021 con un blindaje de 100 millones de euros, a final de temporada les llegará el turno a Parejo y Gayà.

Tanto Parejo como Gayà acaban su contrato en 2020, pero sus cláusulas de rescisión son de 50 y de 30 millones de euros, respectivamente. Por este motivo, y después de poner al día los contratos de la columna vertebral del equipo, Alemany abordará las renovaciones de ambos futbolistas.

Aunque los casos de Parejo y Gayà son distintos, principalmente por la diferencia de edad entre ambos (29 y 23 años), son dos futbolistas que han realizado una magnífica temporada y que ya tienen varios clubes llamando a su puerta. Con Parejo ya se habló, hay buena sintonía con el capitán que este año ha ofrecido su mejor versión, y las partes se citaron al final de temporada.

Gayà, por su parte, tiene otra historia. El de Pedreguer tiene intención de continuar en Mestalla, sobre todo después de que lo pasó muy mal cuando Cesare Prandelli fue el inquilino del banquillo, pero su cláusula ha ido en descenso en lugar de aumentar con los años. El contrato del lateral acaba en 2020 y su cláusula es de 40 millones. Pero el próximo 1 de julio, baja hasta los 30 millones, una cantidad asequible para cualquier equipo de la Premier.

Mateu Alemany siempre ha ido por delante de los acontecimientos. El año pasado no dudó en sentarse con Rodrigo, que firmó hasta 2022 y con una cláusula de 120 millones, y el rendimiento del delantero internacional le ha cargado de razón. El director general también negoció con los internacionales sub-21, Carlos Soler y Lato, que firmaron hasta 2021 con cláusulas de 80 millones. Esta misma hoja de ruta de renovaciones de Alemany se ha llevado a cabo tambiém con los fichajes.

El patrón está muy claro: Contratos largos y cláusulas de rescisión elevadas. Así, por ejemplo, Neto, Paulista y Coquelín tienen un blindaje de 80 millones de euros, mientras que las de Zaza y Maksimovic se elevan a los 100 kilos.