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Las 210 hectáreas que según acaba de anunciar el gobierno local se recalificarán para crear una bolsa de suelo para dotaciones asistenciales y educativas privadas están blindadas con la máxima protección en el Plan de Acción Territorial de la Huerta. El PATH clasifica la zona agrícola del sur de la ciudad, junto a la V-30, como Huerta de Protección Integral, definición que incluye "la huerta más valiosa y frágil que, por su estructura parcelaria, cultivos propios de huerta y necesaria permanencia del sistema de riego milenario, requiere un tratamiento diferenciado y apoyo económico para complementar las rentas agrarias".
El concejal socialista Vicente González Móstoles preguntará al equipo de gobierno por esta "grave incongruencia" en el pleno ordinario de hoy donde se dará cuenta de la memoria ambiental de la revisión del PGOU.
Más informes en contra
La Dirección General de Gestión del Medio Natural remitió el pasado 11 de enero al ayuntamiento una serie de informes sobre la revisión del PGOU entre los que destaca por su contundencia el del Servicio de Evaluación Estratégica. Dicho informe apunta que la revisión del PGOU planteada por el ayuntamiento "aborda sin ningún capítulo que justifique la necesidad de ocupación de suelo de huerta". Recuerda que la Generalitat prevé solicitar la Declaración de Patrimonio de la Humanidad para el Tribunal de las Aguas y remite al al ayuntamiento al duro dictamen del año 2000 del Consell Valencià de Cultura en el que exigía una actuación inmediata de protección de la huerta o de lo contrario este paisaje desaparecía en 50 años.
El Servicio de Evaluación Estratégica apunta que "lo prudente sería mantener medidas cautelares frente a la realización de infraestructuras y reclasificación de la huerta". Añade que estas actuaciones "deberían abordarse desde una visión global del territorio con todos los municipios afectados a partir de los resultados del plan de la huerta". De hecho continúa "la aprobación del PATH tendría la ventaja de establecer unas directrices comunes que evitarían la intervención desordenada de cada una de las administraciones". El equipo de gobierno, sin embargo, asegura en la memoria ambiental que la revisión del PGOU seguirá adelante y no se someterá a un plan que aún no está aprobado sin perjuicio de que una vez en vigor el PGOU se adapte.
El Plan de la Huerta, cuya tramitación avanza de manera lenta, puede llegar tarde para algunas zonas agrícolas como las situadas al sur de la V-30 que ahora el ayuntamiento quiere recalificar.
