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El grupo socialista del Ayuntamiento de Valencia ha exigido al consistorio que garantice la seguridad de los espectadores que acudan en veinte días al Ágora para presenciar el Open 500 de tenis de Valencia, ya que se disputará sin que la construcción del edificio haya finalizado. La disputa del torneo está prevista en esa instalación desde el 31 de octubre hasta el día 8 del próximo mes de noviembre.

La concejala Mercedes Caballero recordó en un comunicado que los socialistas valencianos ya habían alertado de la posibilidad de que el edificio no estuviera concluido para la celebración de la competición

Este extremo, según Caballero, fue negado reiteradamente por el Partido Popular y ahora se revela como cierto "al conocerse que el retraso impedirá colocar las alas, una estructura móvil superior destinada a graduar la entrada de luz natural".

"Como ya advertimos, las obras del Ágora no estarán totalmente finalizadas para la celebración del torneo. El PP lo negó y ahora quiere vender que todo estará a tiempo, cuando la realidad es que la construcción no habrá acabado", prosiguió.

Caballero denunció que "el inmueble no ha pasado las revisiones e inspecciones técnicas pertinentes" y preguntó al consistorio si el edificio pasará al menos la inspección del Cuerpo Municipal de Bomberos antes de su apertura.