El concejal socialista Vicente González Móstoles aseguró ayer que "es intolerable" que las empresas que formaban parte de Cabanyal 2010 "se vayan cobrando de una sociedad pública que, además, está en perdidas". Como informó ayer Levante-EMV la Sindicatura de Comptes ha cuestionado abiertamente en su última auditoría la operación de salida de los ex socios de Cabanyal 2010, la empresa creada por Generalitat y Ayuntamiento de Valencia para desarrollar el plan especial del Cabanyal. El Sindic considera que la cantidad (7,8 millones de euros) pagadas por las acciones "no están suficientemente justificadas" y que las compensaciones (intereses) a los ex socios privados, cifradas en 800.000 euros, "no eran aplicables".

El concejal del PSPV Rafael Rubio ya denunció en su día que la constitución de Cabanyal 2010 era "anómala y fraudulenta". "El tiempo nos ha dado la razón", apuntó Móstoles. "No era normal que a los socios se les compensase con el euribor más un punto. Si entras en una sociedad tienes que asumir un riesgo", añadió Móstoles. Las acciones debían haberse recomprado a precio de mercado. La cantidad que se les está pagando es una "barbaridad". Ese dinero se podrían haber destinado perfectamente a la rehabilitación del Cabanyal, apuntó el concejal de la oposición. A juicio de Móstoles, "todo esto pone en evidencia que la operación urbanística del Cabanyal es una desgracia socialmente hablando y un fracaso económico". Los tribunales están multiplicando los costes de las expropiaciones por cuatro. "Es normal que las empresas privadas se marcharan, pero no con esas compensaciones".