Valencia tiene 55 zonas conflictivas por exceso de ruido, que superan los 75 decibelios (dB), aunque en algunos de estos lugares las molestias se han reducido debido a la campaña del ayuntamiento de colocación de asfalto fonoabsorbente en la calzada en los últimos años. Este material se ha extendido durante 2009 con el uso de dinero del llamado Fondo de Inversión Local del Gobierno, el fondo Zapatero. Con ese trabajo el consistorio reconoce que el ruido ha bajado en 402 calles entre 0 y 10 dB, según los lugares.

Los tres puntos con mayor contaminación acústica, donde se supera lo permitido en la legislación, son la avenida Ausiàs March a la altura del número 190, con 80 dB, que se encuentra en la pista de Silla casi en el límite con el término de Sedaví; en la V-30 en el cruce con la calle Campos Crespo, con 79,9 dB, y la calle Guillem de Castro a la altura del 144, con 78,2 dB. Estos valores se producen durante la mañana y es el tráfico el principal foco de origen.

Los técnicos municipales detectaron esos lugares cuando realizaron las mediciones para elaborar el Mapa del Ruido y luego los han incluido en los Planes de Acción en Materia de Contaminación Acústica. Un 60% de los puntos están situados entre los distritos de Ciutat Vella, L' Eixample y Extramurs.

Los ediles del grupo socialista, Carmen del Rio y Francisco Carsí, calificaron ayer los planes de acción de "pocos ambiciosos en la previsión de medidas y en fijar los plazos para su puesta en funcionamiento. Muchas no están presupuestadas, 30 se han hecho gracias al plan Zapatero, otras están repetidas y 17 ya están incluidas en el plan de Confianza de la Generalitat. Sólo se fijan el objetivo de minorar entre 0 y 5 dB. Compartimos los ejes básicos pero la relación de medidas a aplicar está incompleta", opina Del Río. Carsí, por su parte lamentó que "no se contemple una red de aparcamientos disuasorios en las entradas de la ciudad ni remodelar las líneas de la EMT ni la promoción del uso de motores eléctricos".

La concejala de Contaminación Acústica, Lourdes Bernal, comentó que muchas de las peticiones socialistas ya figuran en los planes y reconoció errores en el listado de inversiones.