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Las personas que durante más de una semana ocuparon un caserón -situado a 30 metros de la comisaría ubicada junto a la delegación del Gobierno- ya han sido detenidos. Así lo aseguró ayer el propietario del inmueble, que resultó ser un taller de fabricación de velas que data de 1920. El dueño afirmó que fue un familiar quien le avisó del "expolio" que estaba sufriendo su propiedad, tras la denuncia de los vecinos en Levante-EMV. Fuentes del Cuerpo Nacional de Policía aseguraron hace cuatro días que ya habían iniciado los trámites judiciales que, finalmente, han concluido con el desalojo y la detención de los ocupantes del caserón ubicado en la calle Escuelas del Temple.

Hace diez días, los vecinos alertaron en diversas denuncias de que la vivienda había sido ocupada y estaba sufriendo un expolio ya que los ocupas "aprovechaban la noche para sacar los muebles". El dueño de la vivienda lo confirmó ayer y tramitó la pertinente denuncia. "Me han dicho que refuerce la seguridad para evitar que vuelvan a entrar en mi propiedad", añadió.

Paralizada desde hace 14 años

El propietario -que vive en Alicante- aseguró que heredó la propiedad en 1996, y la registró en 2003. La vivienda la construyó su abuelo y responde a un taller de fabricación de velas. Sin embargo, el dueño afirmó que, durante 14 años, el ayuntamiento no le ha permitido "mover ni un solo ladrillo, ni realizar reforma alguna". Y es que, en un proyecto urbanístico de intervención en la zona, el consistorio prevé el derribo del caserón -y de otro edificio cercano- para construir una plaza.

Es más, el proyecto municipal respeta la fachada del taller de velas, para construir una especie de pasadizo en el espacio que hoy ocupa la escuela taller.

"No me han dejado realizar ninguna reforma durante 14 años, pero no mueven ni un dedo cuando me están robando delante de una comisaría", se quejaba el propietario. Los vecinos, por su parte, estaban encantados ayer con la detención de los ocupantes de la vivienda ya que "nos preocupaba mucho ver cómo estaban robando delante de nuestras narices, y nadie hacía nada. Te sientes impotente".