Quinientas viviendas -165 de ellas de protección pública-, 5.000 metros cuadrados para zonas verdes y equipamientos, y un parque de 15.000 metros cuadrados, es el uso previsto para los terrenos del estadio del Levante UD si finalmente se ejecuta el convenio firmado el pasado 31 de mayo por el Ayuntamiento de Valencia y el club de fútbol. El nuevo campo, por su parte, tendrá un uso compartido con el Ayuntamiento y la previsión es realizar allí campeonatos de fútbol locales y grandes eventos culturales.

El convenio pasó ayer por la Comisión de Urbanismo y ahora se abre el periodo de información publica para que los ciudadanos puedan presentar alegaciones. Según explicó el concejal del ramo, Jorge Bellver, de los 24.000 metros cuadrados de la parcela donde se asienta el estadio Ciudad de Valencia, el 80% será de uso dotacional, principalmente zonas verdes y equipamientos públicos, con al menos uno de carácter educativo. Y en los 4.000 metros restantes está previsto levantar alrededor de 500 viviendas, de las cuales un 30% deberán ser de protección pública en cumplimiento de la nueva normativa estatal. En total, la superficie techada será de 64.000 metros cuadrados repartidos en torres que no deben superar las 20 alturas.

Por lo que se refiere al nuevo estadio, Bellver reiteró que tendrá una capacidad para entre 15.000 y 18.000 personas y que será de uso compartido entre el Levante UD y el Ayuntamiento. El concejal aseguró que la ciudad carece de una dotación de este tipo y vaticinó un amplio aprovechamiento de la misma, desde campeonatos locales de fútbol hasta eventos culturales que no precisó.

El convenio, que deberá ser aprobado en el próximo pleno, deja libertad al club para proponer los terrenos donde se levantará el nuevo estadio y por el momento se desconoce su ubicación y su condición (públicos o privados). El club también deberá hacerse responsable de la financiación del proyecto en su totalidad.

En el convenio, sin embargo, no se establecen plazos. Todo dependerá del Levante, que ya ha anunciado que levantará el nuevo campo cuando tenga cerrada la operación urbanística y garantizada la financiación.

El convenio recibió ayer el visto bueno del Grupo Socialista, que ve en esta operación importantes diferencias con el convenio de Mestalla, entre ellas la forma de hacerlo más pausada, la decisión del club de asegurarse su financiación, la construcción de VPP en la parcela recalificada o el uso compartido del nuevo estadio. Sólo ha reclamado más información sobre los cálculos de edificabilidad.

Por su lado, Bellver dijo que este convenio es muy similar al de Mestalla y cree que "los socialistas deben explicar por qué se opusieron a aquella operación".