La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Valencia aprobó ayer un drástico recorte económico al servicio de limpieza realizado por la contrata de FCC- Saneamiento Urbano, una medida que según los trabajadores dejará en precario el baldeo urbano de la ciudad, consistente en la limpieza a fondo con agua a presión. Antes de los recortes salían todas las mañanas 8 camiones con 33 trabajadores durante el día. Pues bien, este servicio de limpieza se ha suprimido y también 2 camiones con salidas nocturnas, de forma que los barrios afectados se limpiarán a fondo una vez cada seis meses, si es posible.

El Comité de Empresa de FCC-Saneamiento Urbano, integrado por CGT, UGT y CC OO, calcula que se suprimirá el 67% del servicio de baldeo mixto en los distritos de Pobles de L'Oest, Pobles del Nord, Benicalap, Rascanya, Benimaclet, la Saidia, Campanar, El Pla del Real, Algirós y Camins al Grau.Es más, la aportación al desempleo del Ayuntamiento de Valencia con esta medida es de 33 trabajadores, a los que hay que añadir un número incluso mayor en el resto de zonas de Valencia que gestionan otras empresas concesionarias.

Para los sindicatos, esta medida hará que la calidad del servicio actual sufra una merma importante que se añade a la ya precaria situación del servicio. Los trabajadores recuerdan como ejemplo de la pésima gestión el anuncio posterior y puesta en marcha por parte del ayuntamiento de un servicio especial de limpieza de barrios que ya ha sido suprimido, así como el cambio de la organización del barrido manual, antes dotado de tres operarios y un carrito para cada ruta y actualmente provisto de un solo trabajador, lo que provoca que algunas rutas queden incompletas, incluso en dos jornadas de trabajo.

El colectivo de trabajadores de FCC no descarta movilizaciones. Como primera medida han acordado llevar a cabo una ronda de contactos con las asociaciones de vecinos de los barrios afectados para coordinar las protestas. El Comité de empresa también ha solicitado una reunión con el concejal delegado, Ramón Isidro Sanchis, para expresarle sus quejas, y las repercusiones de su decisión.

Hay que recordar -dicen- que en verano no piensan suplir las vacaciones y de 130 contratos que hacían otros años para éste se han contratado sólo a 30.