Gordo, Bolita, Grand Blue, Jaluk o Chewaka son sólo algunos de los nombres de los 47 perros que ayer desfilaron en la carpa que Meeting Dogs tiene instalada frente al Puente de las Flores.

La Sociedad Valenciana Protectora de Animales y Plantas (SVPAP) organizó, por segunda vez, un desfile de animales en adopción de los refugios de Benimamet y San Antonio de Benagéber. El objetivo era darse a conocer y promover la acogida de estos animales. "Que la gente pueda tocarlos y ver como interactúan fuera del refugio hace que se den cuenta de que el perro es un animal muy sociable y muy bueno" comentaba la vicetesorera de la asociación, Susi Balaguer.

Antes del desfile, se subieron a la tarima animales ya adoptados con su actuales dueños que contaron a los asistentes como la adopción les había cambiado la vida. "Nos enamoramos de este perro y lo acogimos, fue algo impulsivo, pero estamos muy contentos", nos contaba Isaac Chapí mientras acariciaba a su perro al que le falta una pata.

Los refugios se llenan de animales, sobre todo en estas fechas de verano en la que la gente abandona a su mascota porque le "estorba" para irse de vacaciones. Todos ellos merecen una segunda oportunidad ya que muchas veces, su único "problema" es no tener raza, pero son en general animales muy dóciles y cariñosos.

"Son los perros más agradecidos que hay, te cogen mucho cariño y eso se nota", afirmaba Arantzazu Cortés, que hace cuatro años adoptó a una perrita de este refugio.

El refugio de San Antonio de Benagéber cuenta actualmente con 400 perros que buscan hogar. Lo único que hay que hacer para poder llevarse a casa a una de estas mascotas es firmar un compromiso de adopción y un contrato. El perro sale ya con microchip, pasaporte y vacuna de la rabia.

Ellos necesitan otra oportunidad, "no se merecían ser abandonados entonces y ahora no merecen morir en una jaula" afirmaba Balaguer.

Una fuente de cariño incondicional

Los perros de refugio son animales dóciles que habitualmente se pasan años esperando a que los adopten. Por sus circunstancias de abandono son mascotas con facilidad para adaptarse. "Al haberlo pasado mal valoran muchísimo cualquier muestra de afecto o atención", comentaban algunos de los que ya habían adoptado, "son todo cariño y alegría".