La organización ha implantado la lengua de signos en las escuelas para discapacitados de Anantapur

Sara Crespo, cooperante de la Fundación Vicente Ferrer en la India, estuvo el pasado jueves en el Centro Cultural Bancaja para exponer los proyectos que impulsa la organización destinados al desarrollo de las personas con discapacidad.

La joven, que ha participado en la implantación de la lengua de signos en las escuelas para niños y niñas sordos que la Fundación ha puesto en marcha en el distrito de Anantapur, ha sido galardonada recientemente por la Confederación Estatal de Personas Sordas.

La FVF cuenta con un sector de trabajo específico en el ámbito de la discapacidad, que abarca el mantenimiento de escuelas residenciales, la formación ocupacional, los tratamientos médicos y la puesta en marcha de talleres de ortopedia.

Asimismo, la organización ha impulsado la constitución de más de 1.200 asociaciones de personas con discapacidad para promover el apoyo mutuo y su reconocimiento social.

El acto, que estuvo organizado en colaboración con la Fundación Bancaja y Asocide CV, contó con la presencia de Sergio Moratón, delegado de la FVF en Valencia.

La Fundación Vicente Ferrer, bajo el lema "Transforma la sociedad en humanidad", trabaja para mejorar las condiciones de vida de los grupos más desfavorecidos de la India y para concienciar a la población española sobre la importancia de ese compromiso solidario.

Para ello, se centra en provocar un cambio que aporte soluciones a largo plazo y contribuya a erradicar la pobreza requiere un trabajo en todos los ámbitos del desarrollo, como la vivienda, la educación o las personas con discapacidad.

La ONGD focaliza sus esfuerzos de transformación en la ciudad de Andrah Pradesh, situada al sureste de la India, donde como consecuencia del rigor de las condiciones de vida de la población rural, la tasa de personas con discapacidad es especialmente elevada en las zonas donde trabaja la Fundación.

Allí se ocupa de algunas de las comunidades más excluidas del planeta, como los dálits o intocables, un sector históricamente condenado a la servidumbre y a los trabajos más humillantes; los grupos tribales, miembros de la denominada backward cast; o las tribus Chenchu, colectivo que registra los mayores índices de pobreza de todo el estado de Andhra Pradesh.

Actualmente su trabajo llega a más de 2.000 pueblos, donde han creado mil quinientas escuelas y centros educativos, beneficiando a dos millones y medio de personas.