La esperada declaración de precios de las fallas de 2011 se ha convertido en una paradoja. Números en mano, las comisiones gastarán 796.947 euros menos que el ejercicio anterior, manteniendo la misma tendencia bajista iniciada el año pasado. En concreto, un 8,4 por ciento respecto a 2010, cuando doce meses atrás ya se había producido una caída del 11,5 por ciento.

Pero esta matemática tiene trampa. Como muestra, las fallas grandes cuestan 735.168 euros menos. Pero ese descenso lo provocan, fundamentalmente, varias fallas de Sección Especial, puesto que su Federación ha establecido un tope de 190.000 euros. Y, por ejemplo, sólo la reducción contractual de Nou Campanar (410.000 euros) ya es más de la mitad de ese recorte general.

Más aún, lo que se ha detectado es un aumento, ligero pero verídico, en el montante de las fallas de categorías inferiores.

A estas operaciones no les falta ni su dosis de picaresca. Por ejemplo, se intuye que alguna comisión de Especial va a pagar a su artista más de los 190.000 euros, con lo que su contrato está firmado a la baja. Y, por contra, hay fallas modestas de las que se intuye que han firmado al alza sabedoras que este año se reduce la subvención municipal, por lo que un ligero "inflado" garantiza percibir más dinero municipal.

La Sección Especial volverá a tener los mismos 13 participantes clásicos, mientras que la Primera A recibe a cinco nuevos participantes (Maestro Gozalbo, Quart Extramuros, Ramiro de Maeztu-Leones, Mercado Cabanyal y Monteolivete) , llegando ya hasta los 19 competidores.

Contestación a culturcat.cat

Durante el pleno de la Junta Central Fallera, el concejal Félix Crespo leyó un informe con el que se exige a la página web culturcat.cat, dependiente de la Generalitat de Catalunya, que retire de sus contenidos la carta de naturaleza catalana que se atribuyen a la fiesta fallera. "No es nuestra intención polemizar, pero sí la de dejar clara cómo es la historia por si alguien la desconoce".

El pleno supuso el regreso del secretario general, Vicente Fayos, a la actividad después de varios meses de baja a consecuencia de una dolencia cardíaca.