La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, negó ayer la mayor y aseguró que las estaciones de medición no se están cambiando de sitio para tener niveles de contaminación inferiores. Según Barberá, quienes así lo aseguran "no dicen la verdad". "Eso no son más que manipulaciones burdas", dijo. "Estamos viviendo un mes de febrero precioso. La luz, el color, el clima, el calorcito, la propia ausencia de contaminación", apuntó la alcaldesa quitando importancia a los últimos datos de contaminación en la ciudad. "No hay ni una nube, estamos en un clima fantástico y maravilloso y creo que somos la envidia", remachó.

En los tres últimos años el ayuntamiento ha trasladado tres estaciones de control de la calidad del aire de zonas de tráfico como la calle Linares, Nuevo Centro y la avenida Aragón a zonas alejadas de la polución, normalmente jardines y entornos suburbanos como el cementerio (bulevar sur). En la actualidad, hay seis estaciones de medición. Tres están en zonas verdes (la del campus de la UPV, la del Molí del Sol y la de Viveros), dos en entorno de tráfico (Pista de Silla y avenida de Francia) y una es suburbana (bulevar sur). En el centro urbano no queda ninguna.

Con esta estrategia, basada en la normativa europea que establece tres categorías de estaciones de medición (de fondo, de tráfico y suburbanas) el ayuntamiento ha logrado reducir los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) hasta en un 56% en pocos años. En Linares se registró en el año 2000 un nivel medio anual de 99 microgramos de NO2, más del doble de los 40 microgramos de tope que fija la directiva europea 2008/50 de Calidad del Aire. Con el cambio de ubicación de la calle Linares al cementerio el valor medio se rebajó en 2010 a 43 microgramos, aún así, por encima de lo permitido.

La Fiscalía de Medio Ambiente ha abierto una investigación para comprobar si grandes ciudades como Madrid, Barcelona y Valencia están usando esta estrategia de alejar las estaciones que miden la calidad del aire para maquillar sus niveles de polución. El fiscal, según informó ayer Europa Press, también ha abierto una investigación para comprobar si se cumplen los niveles de particulas contaminantes que exige la Comisión Europea.

Ciudades como Valladolid instaban ayer a sus ciudadanos a no coger el coche para rebajar los niveles de polución. La ministra de medio Ambiente, Rosa Aguilar, que calificó de "trampas al solitario" el alejamiento de las estaciones de calidad del aire de las calles con más tráfico, ha convocado una reunión para hoy con la Federación de Municipos y Provincias. El objetivo es fijar medidas para luchar contra la contaminación atmosférica.

La situación anticiclónica está disparando los niveles de contaminación de NO2 en muchas ciudades. En todas las estaciones de Valencia se superaron el martes los 40 microgramos permitidos.

Rita Barberá, sin embargo, no está preocupada. La ciudad está en "permanente control" y dentro de los parámetros de contaminación autorizados. La regidora calificó de "burda manipulación" las denuncias sobre el cambio de ubicación de las estaciones. Aprovechando su participación en la suelta de anguilas en la Albufera, dijo que "la calidad del aire está muy bien" e instó a no dejarnos arrastrar por el problema de contaminación que sufre Madrid.

Calabuig advierte que irán al juez si no se dan datos veraces

El candidato socialista a la Alcaldía de Valencia, Joan Calabuig, reclamó ayer al ayuntamiento que sea transparente con la información sobre contaminación del aire. "Los datos no se dan correctamente y los medidores que no funcionan durante varias horas del día". Calabuig advirtió de que "si esta situación no se rectifica, no descartamos ir a los tribunales".

El candidato de EUPV, Amadeu Sanchis, reclamó medidas urgentes al ayuntamiento para combatir el aumento de NO2, uno de los principales contaminantes urbanos. "No tiene ninguna explicación que después del día que vivimos ayer [por el martes] no se tomen medidas".