La Comisión de Cultura del Congreso de los Diputados ha aprobado hoy una iniciativa en la que solicita al Gobierno que apoye la declaración de las fiestas valencianas las Fallas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.

A través de dos proposiciones no de ley del PSOE y el PP y tras acordar ambos grupos parlamentarios una enmienda transaccional, se ha pedido al Ejecutivo, por unanimidad, que apoye la candidatura de las Fallas para conseguir su inclusión en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco.

La iniciativa recoge que las Fallas constituyen "una fiesta de gran singularidad y proyección internacional" y son una de las tradiciones "más multitudinarias y populares", en las que trabajan más de 7.500 personas y que tiene un impacto económico anual sobre la ciudad de Valencia de 700 millones de euros.

El portavoz del PSOE en la Comisión de Cultura, Joan Calabuig, ha destacado que las Fallas son "patrimonio del pueblo valenciano que transciende de Valencia" y que merece ser salvaguardado, pues sostiene un legado cultural, ritual y social. "Las fallas hunden sus raíces en el esfuerzo de organización e imaginación", ha añadido Calabuig.

El diputado socialista ha recordado que el Ayuntamiento de Valencia acordó por unanimidad, el pasado 28 de enero, iniciar el procedimiento que lleve a la inscripción de la fiesta de las Fallas en la lista de la Unesco.

La aprobación de esta moción es el primer paso para elevar la candidatura de las fiestas valencianas ante el Estado español que, a su vez, la presentará en su momento ante la Unesco.

En este sentido, la portavoz del PP Marta Torrado ha explicado que la iniciativa insta al Gobierno a que muestre "su apoyo al acuerdo adoptado por el Ayuntamiento de Valencia", para conseguir esa declaración.

Torrado ha mostrado su "satisfacción" y "alegría" porque el PSOE apoye las tradiciones valencianas, si bien ha dicho que "quizás sea por la proximidad de las elecciones".

No obstante, ha defendido que el reconocimiento de la Unesco supondría la conservación de las Fallas, así como un impulso "definitivo" a su difusión y al conocimiento del oficio de artista fallero.