La frase "vuelva usted mañana" tiene los días contados en el Ayuntamiento de Valencia. Y es que el Gobierno que preside Rita Barberá está ultimando los detalles de un proyecto "ambicioso" y "pionero" para conceder licencias en 24 horas. Eso sí, siempre que se trate de permisos para actividades inocuas es decir, aquellas que no sean molestas, nocivas, insalubres o peligrosas. Para este tipo de permisos -los de actividades calificadas-, sin embargo, el plazo máximo para la concesión de licencias no excederá de los tres meses. El objetivo es eliminar las trabas burocráticas que obligaban a realizar un peregrinaje entre los diferentes servicios municipales, y dilataban el proceso, para conseguir que cualquier emprendedor ponga en marcha su negocio al día siguiente de presentar la documentación requerida en el ayuntamiento.
La alcaldesa de la ciudad, Rita Barberá, anunció ayer este proyecto con la satisfacción del trabajo bien hecho, sabedora del "enorme esfuerzo" que está realizando tanto del concejal de Coordinación Jurídica de Ordenanzas, Licencias e Inspección, Félix Crespo, como los funcionarios que trabajan en su área, incluida la directora general, Esmeralda Orero. El proyecto no es baladí, y el mecanismo para ponerlo es marcha, de gran complejidad técnica.
¿Cómo se consigue agilizar los trámites burocráticos manteniendo las garantías jurídicas? La clave se encuentra en la denominada "declaración responsable y comunicación previa" que firmará el emprendedor, y en que el ayuntamiento sustituirá los controles previos a la autorización por inspecciones posteriores. Así se simplifica el procedimiento y se garantiza la seguridad jurídica. "El objetivo es suprimir los trámites que dilataban el proceso para ir directamente a la autorización. El usuario entregará toda la documentación requerida y el ayuntamiento dará el visto bueno en 24 horas. Después vendrán los controles y las inspecciones a pie de obra para ver si el proyecto realizado se adecúa al permiso. Si no es así, se impondrán las sanciones pertinentes", explicó Barberá.
"Flecos pendientes"
De momento, el ayuntamiento tiene en marcha el 80% del proyecto. Para resolver los "flecos pendientes" la concejalía de Félix Crespo dispone de dos meses ya que la previsión es empezar a conceder licencias en tiempo real a partir de enero de 2012. "La idea es tenerlo todo preparado y previsto el 31 de diciembre con un procedimiento unificado que agilice los trámites. Eso significa que para un procedimiento único se sentarán en la misma mesa los agentes implicados para la concesión de los permisos. Ahora bien, hay que tener en cuenta que no es lo mismo abrir una zapatería que un restaurante que necesite cámara de refrigeración o unas requisitos técnicos añadidos", explicó Crespo.
Entre las principales dificultades técnicas con las que se han encontrado los funcionarios a la hora de poner en marcha esta iniciativa, la directora general Esmeralda Orero destacó que "existen contradicciones entre la normativa europea, estatal, autonómica y local, que estamos intentando solucionar".
La alcaldesa de Valencia presentará el proyecto este lunes en la Federación Española de Municipios y Provincias para que el resto de localidades "imiten nuestro modelo, único y pionero".
Barberá: "Aún no he podido estudiar las cuentas del Consell"
La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, reconoció ayer que "aún no ha tenido tiempo" de "mirar con detenimiento" cuánto dinero destina la Generalitat Valenciana al municipio que preside, ni para qué proyectos. Y es que, en su opinión, las cuentas del Consell "merecen una serena reflexión". A pesar de que Barberá se negó a realizar valoración alguna sobre los presupuestos, no dudó en sacar pecho ante la gestión del Consell. "Lo que sí puedo decir es que aplaudo la valentía de la austeridad con la que han redactado los presupuestos de la Generalitat Valenciana. Son los mejores presupuestos que se podían hacer porque no se han producido recortes, ni muchísimo menos, en temas tan importantes como las prestaciones sociales, la educación y los servicios sociales. Además, están resolviendo problemas tan graves como el pago de las farmacias. En este momento es todo lo que he podido mirar", afirmó la alcaldesa.
Ahora bien, las declaraciones de Barberá se contradicen totalmente con las aportadas por el portavoz socialista Joan Calabuig, quien destacó hace tres días que para la construcción de nuevos centros educativos "el Consell ha reducido la partida de 189 millones a 42, es decir, un 77 %". "Sólo se podrán atender los pagos pendientes y la deuda, pero no hacer más colegios", puntualizó. En materia sanitaria, los socialistas también lamentaron la falta de dinero para centros de salud, además de criticar la reducción del 47 % para inversiones. m. ros valencia
