El Ayuntamiento de Valencia ha retirado de sus presupuestos generales la subvención al Consejo de la Juventud, 48.000 euros que son el soporte principal de la entidad, en la que están agrupadas hasta 54 asociaciones juveniles de toda la ciudad. Para sus responsables, quitarles la subvención puede suponer su muerte, pues también les ha sido suspendida la ayuda de otros organismos como el Instituto Valenciano de la Juventud (IVAJ) o Inmigración.

El Consejo de la Juventud de Valencia, que esta semana celebra su 30 aniversario, disfrutaba de una subvención de 48.000 euros anuales, a los que había que sumar otros 20.000 aproximadamente de distintos organismos oficiales. Con ese dinero se realizaba una labor de información y asesoramiento en materias tan sensibles como empleo, vivienda, VIH, consejos escolares etc., además de organizar actividades relacionadas con la difusión del valenciano y una feria en la Universitat en la que las entidades podían mostrar sus trabajos y propuestas.

Este año, sin embargo, todas esas ayudas han caído en cascada. Han desaparecido, dice Sandra Gómez, vicepresidenta de la entidad, los 9.000 euros del IVAJ, otro tanto de Inmigración y ahora la subvención municipal, que era el grueso del presupuesto.

Las asociaciones hubieran entendido un recorte de las ayudas, como se está haciendo en todas las partidas", pero no comprenden que les retiren toda la subvención y los dejen a cero. "Eso es una decisión política", asegura Gómez, que recuerda, además, que la decisión no les ha sido comunicada oficialmente y han tenido que descubrirlo por la desaparición de la partida en los presupuestos de 2012.

De hecho, la vicepresidenta del Consejo de la Juventud de Valencia duda de la legalidad de la decisión, pues el convenio, que tiene una periodicidad de dos años, debía prorrogarse ahora y desde el consejo hicieron la petición correspondiente sin que el Ayuntamiento les contestara, lo que en términos legales y de acuerdo con el texto del propio convenio, supone la prórroga automática.

En cualquier caso, y a falta de decidir el futuro de este convenio, el malestar es manifiesto. "Ahora no sabemos qué va a pasar con las dos personas que trabajan allí ni podemos seguir abriendo como hasta ahora. Nos mantendremos como persona jurídica y veremos qué pasa, pero esto es el cierre", asegura Gómez. Lo que está claro, añade, es que el consejo será "más débil y menos reivindicativo".

"Ha bajado su actividad"

En respuesta a estas acusaciones, Beatriz Simón emitió un comunicado en el que asegura que el ayuntamiento seguirá dando al consejo 37.000 de los 85.000 que tenía este año. Es el dinero correspondiente al alquiler y mantenimiento de la sede de la calle José María de Haro.

Argumenta, así mismo, la crisis económica y la reducción de la actividad del Consejo de la Juventud en los últimos años, ejemplo de lo cual es que en 2011 apenas han utilizado una vez el Casal d'Esplai del Saler. De todas formas, Beatriz Simón recuerda que tienen a su disposición otras sedes juveniles y que les financiará cursos y campañas concretos.

¿Una venganza de Beatriz Simón?

El centro de todas las iras, tras la supresión de la subvención, ha sido la concejala de Juventud, Beatriz Simón, a la que atribuyen la medida. Según Sandra Gómez, hace tres años la edil presentó un Plan Jove que finalmente no se puso en marcha por la presión de las organizaciones juveniles. Consecuentemente, un año después, es decir, hace dos, la subvención la redujo de 78.000 euros a 48.000 (-40%) y ahora, cuando ha llegado el momento de renovarlo y aprovechando los planes de austeridad, la ha suprimido completamente, asegura Gómez.