Miles de niños, sonrisas emocionadas, caramelos volando por doquier y un ambiente cargado de magia. Estos son indicios infalibles de que Melchor, Gaspar y Baltasar andan muy cerca.

A las 17:00 de la tarde y con un tiempo primaveral, los tres Reyes Magos de Oriente llegaron ayer a Valencia. Cientos de niños les recibieron nada más desembarcar en el puerto de Valencia, junto al edificio del Reloj. Allí, durante poco más de 100 metros, sus majestades se dieron el primer baño de masas de la tarde y comenzaron a repartir caramelos. Después, se subieron a tres coches oficiales con dirección a la Alameda para que comenzara la gran cabalgata de Valencia.

El desfile de este 2012 presentó algunas diferencias respecto a los de años anteriores. La principal fue la reducción del presupuesto, que el ayuntamiento intentó ajustar hasta un 10%, con lo que se espera ahorrar unos 10.000 euros. No obstante, la ilusión de la gente, en especial de los más pequeños, no se recortó un ápice. Al final fueron 42 carrozas, tres más que el año anterior, y más de 2.200 participantes y figurantes que lanzaron cerca de 10.000 kilos de caramelos. Como ya viene siendo tradición, los dulces repartidos no tenían gluten, y así no se perjudica a las personas celiacas.

Para Javier y Pablo, de 4 y 7 años, era la primera cabalgata y se mostraban entusiasmados antes de llegar a la Alameda. Sus padres, de Bétera, confiaban en que los niños pudieran ver de cerca a los reyes. Yaiza y Georgina, en cambio, ya son unas expertas. Su padre explica que prácticamente todos los años se acercan ya que viven muy cerca, en el mismo barrio de Exposició. Ellas esperaban que los reyes les trajeran muchas cosas, en especial Melchor, su preferido porque "es el más mayor y porque tiene la barba blanca".

Sin embargo, no a todas las personas les cogía tan cerca. Louise y su hijo Oliver son de Auckland, Nueva Zelanda. Allí, aseguran, nadie conoce nada sobre los tres Reyes Magos. La experiencia les ha encantado aunque confiesan que no se esperaban tantos codazos y empujones de la gente para ponerse en primera fila y conseguir más dulces.

El concejal de Coordinación Jurídica, Félix Crespo, el director de COPE Valencia, Sergio Peláez, y el presidente de la Asociación Subsahariana ASIPREV, Assane Sylla, fueron los encargados de representar a Melchor, Gaspar y Baltasar, respectivamente, este 2012. De sus tres carrozas destacó la del último, construida con la apariencia de un camello que incluso movía la cabeza.

Asimismo, el resto de carruajes también inundaron el ambiente de magia y el suelo de caramelos. Entre ellas se diferenció la del equipo de fútbol Huracán Valencia CF, que a ritmo de Bob Dylan y su "Hurricane" hizo las delicias de los más pequeños.

La cabalgata finalizó en la plaza del Ayuntamiento. Allí los Reyes Magos se apearon de sus carrozas, bajaron al salón de Cristal del Ayuntamiento de Valencia y recibieron a tantos niños como pudieron.