Los servicios de recogida de basura selectiva volvieron ayer a trabajar con normalidad tras tres días sin servicios extraordinarios, que tuvieron como resultado un fin de semana con los contenedores llenos de basura hasta la bandera tras el día de Reyes, que cayó viernes.

Los camiones trabajaron ayer con normalidad, según fuentes de FCC, una de las tres empresas encargada del servicio de limpieza y recogida en la ciudad. Pero hay mucha basura acumulada. Por ello, los barrios de la periferia aún reflejaban ayer contenedores de cartón y plástico llenos a rebosar con bolsas, paquetes y envoltorios tirados por el suelo.

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, sacó ayer pecho por el concejal responsable de Limpieza y Residuos Sólidos, Ramón Isidro Sanchis, al explicar que había recibido mensajes del mismo "diciendo que, efectivamente, la basura se había acumulado, como es natural en un fin de semana en el que se han celebrado Los Reyes y ha habido, regalos, cartones y más basura. Es normal y lógico".

Sin embargo, los socialistas calificaron de "burla" las declaraciones de Barberá. "Una vez más parece que la alcaldesa no quiere asumir su responsabilidad sobre los recortes que afectan al servicio de limpieza y que se traducen en un aumento de la suciedad de las calles". Y es que para la concejala socialista Isabel Dolz el único motivo de que la basura se acumule durante cuatro días no es otro que el "tijeretazo" que ha sufrido el servicio en los presupuestos. Además, Dolz acusó a Barberá de "sacrificar la estabilidad laboral de los trabajadores de las contratas municipales para mantener gastos superfluos como el puente de las Flores". Por ello, aconsejó a la alcaldesa que "deje de falsear" la realidad "porque la verdad se les acumula en las calles en forma de basura que no pueden ocultar".