La demora en la recogida de la ingente cantidad de basura generada por la festividad de los Reyes Magos ha desatado todo tipo de críticas de la oposición municipal, que ha aprovechado la circunstancia para denunciar los recortes realizados en varios servicios básicos de la ciudad, entre ellos el de limpieza. Ayer, el grupo Compromís lamentó, por ejemplo, que se abunde en estos recortes y por otro lado se sigan manteniendo los privilegios de los concejales del PP, entre ellos el coche oficial.

La concejala Pilar Soriano recordó ayer las palabras de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, pidiendo a los vecinos que cesaran en su espiral de peticiones ahora que estamos en tiempo de vacas flacas. Visualiza, así mismo, la suciedad que se ha acumulado en Valencia estos días, "con picos insoportables como el de Reyes, con algunas calles plagas de cartones y envoltorios de los juguetes de los niños". Y se pregunta, después de estas realidades, cómo es posible que los concejales del PP mantengan "privilegios" como el coche oficial y se apliquen "políticas de despilfarro continuo del dinero público".

En palabras de Pilar Soriano, "la alcaldesa Barberá practica el cinismo político o mejor dicho, la ley del embudo: para nosotros ningún recorte, para los ciudadanos todos". Mientras tanto, añade, "sus concejales se pasean en coche oficial por la ciudad o se gasta 3 millones de euros en el Plan del Cabanyal, o exige a los vecinos que no pidan lo que es justo porque no quieren subir impuestos".

A este respecto, el grupo Compromís considera que "todo ha sido una gran mentira". "No sólo han subido todas las tasas por encima del IPC, sino que sus compañeros del gobierno central y de la Generalitat Valenciana han subido todos los impuestos imaginables", asegura Soriano, que considera estas prácticas un "insulto" a la gente.