La inacabada linea T2 del metro de Valencia, paralizada por falta de fondos, sigue acumulando gastos sin que ningún tren circule por ella. El ente gestor de la red de transportes y puertos de la Generalitat, GTP, sacó ayer a licitación por 264.359,50 euros (IVA no incluido) el servicio de mantenimiento, conservación e inspección de la T2.

El contrato, que alude a la vía muerta en que está la inconclusa línea con el eufemismo "en situación transitoria", es de una duración de seis meses. Es decir que la conservación de los tramos ya construidos le cuesta a la Generalitat unos 1.500 euros al día o, si lo prefieren, más de 44.000 euros al mes.

Las obras de la T-2 en Valencia, que comenzaron en enero de 2007, están paralizadas "sine die" por falta de liquidez del Consell. Ya se han construido los 5,2 kilómetros de plataforma ferroviaria entre el barrio de Natzaret y la calle Alicante (2,9 km en superficie y el resto subterráneos). También los túneles desde la calle Alicante hasta General Urrutia. Sin embargo esta línea de 10 km que debía conectar los barrios de Torrefiel con Natzaret, atravesando el subsuelo del antiguo cauce del Turia y del centro histórico, no lleva a ninguna parte. El grueso de la obra, los 428 metros de vía y la estación de Hermanos Maristas, cuyas obras no se han llegado ni a licitar.

La estación del Mercat central, que ha costado 34 millones de euros e incluye un aparcamiento subterráneo de cinco plantas y 475 plazas, tampoco tiene fecha de apertura según informó la semana pasada la Generalitat.