El informe por el que se adjudicaba un contrato por 50 años y 50 millones anuales no incluía ninguna referencia a los técnicos que colaboraron en su redacción ni al método de trabajo.

Según el tribunal, ni la empresa Secuenzia ni el Emshi han podido acreditar tampoco que recurrieran a terceros "con la cualificación necesaria" para realizar el informe, lo que habría compensado la falta de especialización de la empresa.

Según asegura el juez, el ingeniero Alexandre Mulet no pudo desmontar la acusación de que el informe favorable en el que se basó la decisión de la Mesa de Contratación y la Asamblea se hizo con "el método científico" de cortar y pegar el informe de una empresa "que carece de la más mínima solvencia profesional.

Llegados a este punto, el juez califica de "esencial" que la capacidad de elaborar el informe no hubiera sido acreditada "ante el órgano de contratación"-el presidente del Emshi Enrique Crespo- "precisamente antes de que se aprobase el vínculo jurídico con Secuenzia".

Sin embargo, alguna relación con el agua existe, aunque no se acreditó en la causa. El presidente de Secuenzia en los años 2003 y 2004 fue Ildefonso de Miguel, que entre 2004 y 2009 fue gerente del Canal de Isabel II, la empresa pública controlada por Esperanza Aguirre que suministra el agua a Madrid, junto al vicepresidente de la citada comunidad y al tiempo presidente del Canal Ignacio González. Ambos aparecieron citados en como víctimas-fueron espiados en un viaje a Colombia- en el escándalo del espionaje a altos cargos de Esperanza Aguirre destapado en 2009.

En 2007, Secuenzia Pixels, actualmente en manos de Fernando Ruano, cuñado de Ildefonso de Miguel obtuvo un contrato de casi dos millones de euros para el suministro de las aplicaciones para el sistema de Información Judicial de la Comunidad de Madrid. También obtuvo un contrato con el Ministerio de Industria en 2008 por un importe de un millón de euros.