Los organizadores de la verbena de la noche de San Juan han cedido a las presiones de los hosteleros y ayer, tras una reunión con el subdelegado del gobierno, Luis Santamaría, y el concejal de seguridad ciudadana, Miquel Domínguez, decidieron suspender el multitudinario evento por este año. En un principio se habló de trasladar la verbena, pero los organizadores han rechazado esta opción. El ayuntamiento sí que mantiene el reparto de leña para las tradicionales hogueras en la playa, frente al hotel de lujo de las Arenas.

La presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos, María José Broseta, explicó que han tomado la decisión de suspender la multitudinaria verbena teniendo en cuenta los argumentos de seguridad y orden público esgrimidos por Santamaría y Domínguez y "obviando" las afirmaciones de los hosteleros.

Las declaraciones de los empresarios hoteleros del paso Neptuno en las que apuntaban a que la verbena popular que se celebra en la playa la noche del 23 de junio daba mala imagen han levantado ampollas entre los vecinos. Unas declaraciones que el propio subdelegado afeó ayer. "No es acertado hablar de buena o mala imagen; nadie debe hacer aquí juicios de valor", recalcó Santamaría.

Los hosteleros de la zona pidieron por escrito al ayuntamiento que alejara la verbena para no molestar a la clientela de la Fórmula, entre la que se encuentran pilotos y medios de comunicación, que necesitan dormir la noche antes de la carrera. La discomóvil que organizan la Federación de Asociaciones de Vecinos y una emisora de radio empieza a las 12 y acaba a las 3 de la madrugada.

En la reunión celebrada ayer a instancias de la subdelegación y el ayuntamiento se pusieron sobre la mesa dos informes de la policía local y nacional en los que informaban desfavorablemente sobre la celebración de la verbena. La coincidencia de la Fórmula 1, con la celebración de la noche de San Juan, que además cae en sábado, reunirá a miles de personas con ganas de diversión en un mismo espacio, lo que supone una combinación de riesgo para la seguridad y el orden público.

Las administraciones plantearon a los vecinos la alternativa de mover la verbena al norte, hacia la playa de la Patacona, o retrocediendo unos metros, en dirección al barrio del Cabanyal. Broseta apuntó al respecto que" la seguridad está ante todo y unos metros arriba o abajo tampoco iban a cambiar demasiado si de lo que se trata es de mantener el orden público". Además, a estas alturas era imposible volver a tramitar todos los permisos.

El subdelegado destacó que la verbena se hará el año próximo y se comprometió a agilizar el permiso ante Costas. La presidenta de los vecinos recalcó que si el año próximo se organiza, "se hará en la misma ubicación", junto al hotel de las Arenas.