La situación de asfixia en las arcas municipales no sólo ha llevado al gobierno local de Rita Barberá a solicitar 182 millones de euros del plan de pago a proveedores, también está abocando al concejal de Hacienda, Silvestre Senent, a recurrir a figuras legales hasta ahora inéditas para hacer frente al pago de las facturas.

Entre los proveedores a los que se les aplican estás nuevas fórmulas de pago está el conocido empresario valenciano Jesús Barrachina con quien el consistorio ha llegado a una suerte de acuerdo para compensar sus respectivas deudas y ponerse al día en los pagos.

El hostelero ha reclamado al consistorio el pago de varios servicios de «catering» ofrecidos a lo largo de este año. Se trata de ocho facturas por el servicio de suministro de comida y bebida por un monto total de 47.117 euros. Destacan por su elevado importe una factura de 17.550 euros y otra de 12.722, posiblemente de algún ágape ofrecido con motivo de las fallas.

Ante la emisión de las facturas, el Servicio de Gestión Tributaria ha decidido de oficio aplicar la fórmula de compensación de deudas prevista en la ley General Tributaria, que permite a la administración satisfacer una deuda a cuenta de lo que le debe quien se lo reclaman. En este caso, el Servicio Tributario ha comprobado que la empresa de Barrachina (Hosva) adeuda al consistorio un total de 73.856 euros.

El consistorio ha hecho una búsqueda en el sistema de gestión tributaria y ha comprobado que Hosva adeuda parte del canon por la concesión municipal de la Piscina Valencia del año 2009, que asciende a 27.446 euros, con recargo del 5% incluido por no haber sido pagado en periodo de recaudación voluntaria.

Además, el ayuntamiento ha comprobado que el empresario debe varios recibos del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), uno de la propia Piscina Valencia de 2011 que asciende a 46. 151 euros, también con recargo del 5%, y otro de un inmueble de naturaleza urbana en la avenida de las Gaviotas, en el Perellonet, por un importe de 258 euros.

En definitiva, el servicio de gestión tributaria concluye que lo que debe el ayuntamiento es inferior a la deuda de la empresa reclamante con la hacienda local. Y es que, aún compensando la cantidad que le debe el ayuntamiento por el servicio de «catering»—47.117 euros—, el empresario todavía tiene pendiente de pago 26.738 euros.

El alcalde accidental, Alfonso Grau, firmó el viernes pasado la resolución de alcaldía por la que se da por extinguida parcialmente la deuda municipal y se notifica a Hosva que aún tiene pendiente de pago los citados 26.738 euros.

Los «catering» fueron una de las partidas que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, se comprometió a reducir dentro de los planes de austeridad.

En relación al plan de pago a proveedores, el concejal de Hacienda aseguró recientemente que el ayuntamiento está pagando «al día» las facturas de este año. Los grupos socialistas y de EU han puesto en duda esta afirmación y denuncian que el gobierno de Rita Barberá, siete meses después de aplicarse el plan de pago a proveedores «sigue derrochando y sin pagar al día». Recurrir al plan de pago a proveedores impedirá al ayuntamiento realizar inversiones en la ciudad en 2013.