Vecinos y comerciantes del Pasaje Doctor Serra han denunciado el lamentable estado en el que se encuentra este céntrico espacio de Valencia, en el que, además de tiendas, está el turístico Museo Taurino y la entrada a un aparcamiento público. A falta de que las administraciones aborden su remodelación y una empresa privada inicie las obras de la galería comercial contigua, el pasaje está lleno de excrementos de paloma, orines y hasta muebles a la espera de ser recogidos por los servicios municipales.

No es la primera vez que el pasaje Doctor Serra, situado junto a la Plaza de Toros de Valencia y la calle Colón, es objeto de protestas por la falta de limpieza. Su cubierta de cristal está completamente tapada de excrementos de paloma y se ha consolidado ya como uno de los lugares más abandonados en este sentido. También los cerramientos laterales, parte de los cuales son tapias de ladrillos y puertas cubiertas de pintadas, ofrecen un estado poco acorde de la zona, pero lo más lamentable, a juicio de los vecinos, es que el suelo, que puede limpiarse sin problema alguno, esté como está. "Tenemos todo esto lleno de excrementos y de orines, aquí no hay quien limpie y siempre ha sido así", asegura uno de los comerciantes.

La situación es ahora más grave por las altas temperaturas del verano y el olor que desprende, pero sobre todo por la imagen que da del centro de la ciudad. No hay que olvidar que se trata de una zona muy transitada, donde está el Museo Taurino, ayer repleto de extranjeros, y la entrada a un aparcamiento público muy transitado. Hay, finalmente, numerosos comercios que ya no saben a quién acudir para resolver este viejo problema.

Y es que el pasaje Doctor Serra está pendiente de una reforma integral con implicación de la Diputación Provincial de Valencia, responsable de la Plaza de Toros, y del ayuntamiento de la ciudad. También puede verse directamente afectado por la construcción de una galería comercial en el lado contrario al coso taurino, en una gran parcela ahora ocupada por un aparcamiento público que llega hasta la calle Ruzafa.

Esta última obra, impulsada por el grupo AZA, debía comenzar en este mes de agosto, pero aún no lo ha hecho.