La Conselleria de Cultura ha autorizado a la catedral de Valencia a ampliar su museo y excavar los restos de la anterior catedral visigótica y la antigua mezquita, un proyecto que podría ponerse en marcha el próximo otoño con fondos de la propia seo. De forma inminente, además, se va a derribar el murete que tapa los absidiolos góticos de la girola, según anunciaron fuentes del Arzobispado de Valencia.
El proyecto en cuestión ha sido impulsado por el cabildo catedralicio y dirigido por el arquitecto conservador de la catedral Salvador Vila. Se trata de un plan a dos alturas. Por un lado se pretende ampliar el actual museo para darle un mayor espacio y hacerlo más funcional, ya que no había sido modificado en los últimos cuarenta años. Eso incluye la rehabilitación de la zona que fue destruida durante el incendio de 1936 y la puesta en uso de la primera planta del edificio, que está inutilizada.
Con ello se configura un museo en tres plantas con una longitud que abarca hasta la capilla del Santo Cáliz. La ampliación permitirá, además, exponer cientos de obras de arte que en la actualidad permanecen almacenadas por falta de espacio. También podrán exhibirse libros y objetos de valor que se conservan en la seo y que podrán contemplarse con las condiciones de iluminación y disposición adecuadas.
Las excavaciones
Lo más novedoso, en cualquier caso, es el trabajo que se pretende hacer bajo el museo, en lo que podría denominarse el subsuelo del edificio. Por las excavaciones que se realizaron en los años sesenta se sabe que allí hay restos de la catedral más primitiva, restos visigodos y romanos y también de la antigua mezquita, que según Salvador Vila, "estaba bastante próxima al crucero y el presbiterio".
En este sentido, el arquitecto conservador de la catedral explicó que en la actualidad la calle Barchilla, contigua a la catedral, se encuentra más de tres metros por encima de lo que sería la calzada en tiempos romanos, islámicos, visigodos y medievales, lo que significa que "lo que para nosotros hoy es el subsuelo de la seo, podría ser la planta a nivel de calle en aquellas épocas".
Para poner en marcha este proyecto, la catedral de Valencia dispondrá de fondos propios, aseguraron las fuentes. Para dentro de dos meses está previsto acabar el proyecto de ejecución y a partir de ahí se pondrá en marcha un concurso restringido -sólo para empresas especializadas- del que debe salir la adjudicataria. Y para el próximo otoño está previsto que empiecen las obras. Dado que el plazo de ejecución de las mismas puede superar el año, la previsión es que durante todo el ejercicio 2014 el museo catedralicio permanezca cerrado al público.
Derribo del murete
Lo que no va a esperar tanto tiempo es el plan para derribar el murete que tapa los absidiolos góticos de la catedral. Según fuentes del Arzobispado, los trabajos comenzarán de forma inminente y consisten básicamente en tirar el muro de ladrillo de un metro y medio de altura que fue construido en el siglo XIX y tapa uno de los elementos más característicos del edificio.
Las obras, que costarán 180.000 euros, serán pagadas por la Conselleria de Cultura y durarán tres meses. Pese a esa brevedad, la previsión es que la catedral recupere una imagen nueva, con una vista de la girola de la que los ciudadanos han estado privados durante más de un siglo.
