La presidenta del Camino de San Vicente, Francisca Llosa, criticó ayer el estado en el que se encuentra el monasterio de San Vicente de la Roqueta, «cerrado y en ruinas»: «Es una vergüenza para Valencia que lleguen los peregrinos a un lugar así». Llosa desveló que está llamando gente interesada en hacer el Camino „«al principio será en cuentagotas», dijo„, aunque reconoció que están «francamente aterrorizados de que venga gente en aumento, para llegar a un lugar ruinoso, donde la portada románica más preciosa está oculta».

Llosa se preguntó si Valencia «tiene menos capacidad de atención al peregrino que Santiago de Compostela». «¿Acaso nuestro camino romano-visigótico es menos importante que aquel medieval „el de Santiago„, cuando las peregrinaciones vinieron 600 años antes que a Santiago, y el motivo de las mismas fue un cruento martirio de repercusión mundial?», se inquirió Llosa.

Acciones del párroco

Además, la presidenta del Camino de San Vicente pidió «la solidaridad» de los valencianos y cuestionó al consistorio sobre las obras que se harán en la Roqueta: catas, restauración... «Parece que el párroco de la parroquia Cristo Rey „junto al monasterio„ va a promover alguna actuación para recabar fondos y dar la dignidad requerida a nuestro patrón», comentó Llosa.

El Camino de San Vicente es un recorrido que emula el que realizó en el siglo IV el diácono Vicente junto al obispo Valero hacia Valencia. Nace en Huesca y la organización del mismo ya tiene «todos los pueblos que atraviesa marcados en el mapa». «Concretamente estudiada la ruta paso a paso y kilómetro a kilómetro (por un experto ciclista) la tenemos desde Bueña (Teruel) hasta Sagunto donde enlaza con la Vía Augusta hasta Valencia», según explicó ayer Llosa, que señaló que en primavera este colaborador «estudiará el tramo desde Daroca a Bueña», situadas en Zaragoza y Teruel, respectivamente.