Una mujer afectada por una infección crónica del hueso que le obliga a estar la mayor parte del tiempo en silla de ruedas, al tener una discapacidad del 58 por ciento, se ha encadenado hoy en la Plaza de la Virgen de Valencia para exigir que le concedan el grado de "gran invalidez" por su enfermedad.

Dolors Carrasquilla, de 43 años, ha asegurado a EFE que si no obtiene respuesta a su petición antes del próximo domingo, 10 de marzo, comenzará una huelga de hambre para exigir "justicia por la injusticia que se está llevando a cabo con personas como yo".

Fuentes de la Consellería de Bienestar Social han informado a EFE de que la invalidez ha sido reclamada por la mujer al Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS) y han indicado que aunque les consta que solicitó el traslado de su expediente desde Cataluña a la Comunitat Valenciana "éste aún no ha llegado".

Carrasquilla está afectada desde hace 25 años por una osteomelitis crónica, una infección de los huesos por la que le han sido practicadas 35 operaciones en una de las piernas, lo que le ha provocado una discapacidad del 58 por ciento.

A consecuencia de esta enfermedad, en Cataluña le concedieron el grado de gran invalidez en 2009, por el que ofrecían asistencia diaria, alimentos y le pagaban 1.050 euros al mes, pero cuando en 2010 se trasladó a vivir a Sagunto (Valencia) le rebajaron el grado a una "invalidez absoluta", con lo que la cuantía que percibe es de 700 euros.

"A los ocho o diez meses de llegar a Valencia me hicieron pasar una revisión en un tribunal médico y milagrosamente estaba mejor y me rebajaron el grado de minusvalía", ha ironizado Dolors Carrascosa, quien ha agregado que "la estrategia es que no recortan las pensiones sino los grados".

Dolor Carrasquilla ha explicado que su discapacidad solo le permite andar con muletas un máximo de cinco o diez minutos y el resto del tiempo tiene que hacerlo en silla de ruedas

Según ha señalado con los 700 euros que cobra en la actualidad viven cuatro personas, ella, sus dos hijos y la pareja de uno de ellos y además tiene que pagar los medicamentos que toma y un alquiler mensual de 350 euros.