El litoral que rodea el puerto de Valencia podría albergar más bombas como la encontrada el pasado domingo por unos buceadores frente a la playa de la Malva-rosa, artefacto que ya ha sido detonado por especialistas de la Arnada en el mismo fondo en el que se encontraba.
Según fuentes oficiales, la realidad hasta ahora es que "cada vez que se hacen obras de ampliación del puerto aparece alguna bomba", algo lógico si se tiene en cuenta que esta zona de la ciudad fue ampliamente bombardeada durante la Guerra Civil y que incluso al término de la contienda se arrojó mucha munición al agua.
Se trataría, en cualquier caso, de bombas que después de setenta años allí depositadas no representan ningún peligro para nadie y que, por tanto, se irán retirando a medida que se vayan localizando casualmente como ésta última. No está previsto, dijeron las fuentes, hacer ningún rastreo en la zona.
La bomba encontrada por los buceadores del Club de Actividades Subacuáticas "Amigos del Buceo" de Sagunto era un proyectil de artillería lanzado seguramente desde un cañón situado en la costa a algún buque apostado frente al puerto de Valencia.
Con unas dimensiones de 60 centímetros de longitud por 25 centímetros de grosor, para su neutralización se utilizaron dos embarcaciones de la Guardia Civil a bordo de las cuales se desplazaron Buceadores de Medidas Contraminas de la Comandancia Naval de Valencia.
Una vez localizado el artefacto, balizado por la Guardia Civil, se procedió a su detonación en el sitio y se retiraron los restos, que estaban sumergidos a aproximadamente 15 metros de profundidad y a una milla y media de distancia de la Malva-rosa, entre las verticales de la Marina Real y el Hotel Las Arenas.
Las fuentes consultadas aseguraron que no ha habido peligro para nadie y que la operación se desarrolló sin problemas.
