El Ayuntamiento de Valencia tendrá que pagar a la orden religiosa de los Escolapios un millón de euros por unos terrenos destinados a viales y zona verde del barrio de la Malva-rosa que los religiosos tenían que haber cedido gratuitamente. El ayuntamiento ha sacado a exposición pública el convenio con los Escolapios, que permitirá como esperan los vecinos desde hace 20 años ampliar la calle Gran Canaria y que resuelve un conflicto urbanístico surrealista que deja en entredicho la gestión urbanística del consistorio.

El convenio urbanístico firmado en la etapa de Miquel Domínguez como concejal de Urbanismo con el colegio de Escolapios de la Malva-rosa daba a la congregación un plazo de diez años (de 1996 a 2006) para ceder al consistorio una parte del patio del centro que el PGOU marcaba como viales para ampliar la calle Gran Canaria. La cesión no se hizo y el ayuntamiento nunca reclamó. En 2007, ya prescrito el plazo de cesión, los Escolapios mueven ficha e incoan un proceso de expropiación forzosa y reclaman tres millones de euros por el suelo (alrededor de 3.000 m2). El ayuntamiento se negó alegando que el suelo debía haber sido cedido de manera gratuita, pero elTribunal Superior de Justicia de la Comunitat dio la razón en 2011 a las Escuelas Pías reconociendo el derecho de la congregación a cobrar tres millones de euros más los intereses.

El ayuntamiento no recurrió la sentencia y llegó a ordenar el pago de la expropiación, una de las más caras que se recuerdan ya que se pagaría por un terreno en una calle secundaria de la Malva-rosa casi lo que cuesta el metro cuadrado en la avenida de Francia.

Sin embargo, el año pasado el equipo de gobierno frenó el pago y optó por pactar. El acuerdo alcanzado pasa por modificar el PGOU para cambiar la alineación de la calle Gran Canaria reduciendo la franja de suelo del colegio destinada a zona pública. Los Escolapios, que evitan así quedar fuera de ordenación y tener que derribar una parte del edificio renuncian a una parte de la indeminación al quedar compensada con los dos millones en los que se valora el suelo que ellos tenían que haber cedido a la ciudad. El ayuntamiento, con todo, tendrá que pagar el millón de euros de diferencia a los Escolapios.

El concejal socialista Vicent Sarrià denunció ayer la actitud «negligente» del equipo de gobierno de Rita Barberá «por no reclamar en su día el suelo a los Escolapios, lo que ha supuesto una nueva pérdida de patrimonio público».

El titular del colegio de los Escolapios, José Luis Zanón, valoró ayer el acuerdo y aseguró que «se ha arreglado algo que iba a suponer un serio problema para el colegio».