Los agentes de la policía local de Valencia que trabajan en el nuevo y moderno Centro Integral de Seguridad y Emergencias de la Policía Local de Valencia han tenido que volver este fin de semana al método antiguo de tomar nota de los avisos y servicios a mano y a coordinar las intervenciones mediante la clásica emisora. El motivo ha sido un fallo informático cuyo origen aún está por determinar que ha dejado el sistema informático (SIRE) de la central de policía fuera de juego.

La sala de emergencias está ubicada en un edificio de la Central de la Policía Local del Parque de Aviación, en la avenida del Cid, totalmente renovado e inaugurada el 24 de octubre del año pasado por la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y el concejal de Seguridad Ciudada, Miquel Domínguez.

Según denunció ayer el sindicato CC OO, la caída del sistema operativo de la central donde se registran y gestionan las llamadas, se alerta a las patrullas, a los bomberos, a los servicios de sanidad y al 112 provocó «el caos».

El sistema informático dejó de funcionar a última hora de la tarde del sábado y no volvió a estar operativo hasta entrada la mañana del lunes. La reparación de este tipo de averías corre a cargo de una empresa privada que solo atiende de lunes a viernes en horario comercial, lo que, según denunció ayer CC OO, supone una total falta de previsión por parte de la delegación de Seguridad y de la Jefatura de Policía que ha tenido «unas consecuencias nefastas y caóticas». Acumulación de llamadas, dificultad para gestionar los servicios y retrasos en su atención a la ciudadanía, fueron algunas de las incidencias registradas este fin de semana en la central de transmisiones de la policía local por la avería y por no tener un servicio de reparación 24 horas como correspondería a un servicio tan importante como es el de la seguridad de la ciudad.

Fuentes de la sección sindical de UGT en la policía local de Valencia reclamaron, por su parte, una «solución urgente» y se preguntaron «qué ocurriría si se vuelven a repetir este tipo de averías en momentos de máxima necesidad como las fallas».

El cerebro del CISE cuenta con un equipo auxiliar para situaciones de avería o pérdida de suministro que, sin embargo, este fin de semana no sirvió de mucho.