En la entrega de Honores y Distinciones que el Ayuntamiento de Valencia celebrará el próximo viernes 4 de octubre, con motivo de la festividad del 9 d´Octubre, habrá un lugar especial para la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE).

Con motivo del 75 aniversario de la entidad -el 13 de diciembre soplará las velas-, el consistorio valenciano aprobó el pasado verano asignarle la medalla de oro de la ciudad debido a su larga trayectoria en el ámbito de la integración social de las personas ciegas y discapacitadas de Valencia.

Un premio a la «ilusión»

El delegado territorial de la ONCE en la Comunitat Valenciana, José Manuel Pichel, se muestra feliz con el reconocimiento municipal a la labor de la organización durante estos tres cuartos de siglo. «La medalla de oro es un premio que se otorga la sociedad a sí misma, a su ilusión. Con ella, los ciudadanos han podido ayudar a todos los ciegos y personas con algún tipo de dependencia durante todos estos años», señala el directivo del colectivo en Valencia. «Desde su fundación, la ONCE trabaja en tres direcciones muy importantes para la ciudad. El primero pasa por seguir con la creación de puestos de empleo para ciegos y discapacitados. En Valencia, en lo que llevamos de 2013, se han conseguido ya 310 trabajos nuevos mediante la venta del cupón, 34 de los cuales son puestos fijos».

Sin embargo, aunque la independencia económica de los invidentes es una misión primordial para la ONCE, la institución no sólo se ha volcado en el tema laboral. Por eso, la difusión de los servicios prestados por la institución también han pretendido potenciar la imagen turística de Valencia. «Como agradecimiento, del próximo 7 al 10 de octubre, un total de cinco millones de cupones circularán por toda España con instantáneas de la ciudad», apunta Pichel. En concreto, la plaza de la Virgen, los casales falleros, los dulces de Sant Dionís y la «pilota» valenciana ilustrarán los billetes de cuatro sorteos.

Por último, el delegado territorial del colectivo, resalta la cohesión social y empresarial que ha favorecido la ONCE con sus iniciativas. «Se generan alianzas especiales en torno a la cita con la ilusión», subraya Pichel, quien se muestra orgulloso de los acuerdos y convenios en los que la ONCE colabora con gripos privados o entes públicos.

Estos tres puntales de la actuación de la organización desemboca en la idea original de la ONCE, la de la integración de los invidentes y dependientes. «Hoy cualquier niño que se queda ciego, o cualquier adulto con una discapacidad no es una carga, sino que son un contribuyente más para la sociedad». En este sentido, cuando el ayuntamiento decidió premiar la labor del colectivo en Valencia, el pasado mes de julio, la alcaldesa de la ciudad, Rita Barberá, aseguró que la ONCE «es una organización que, si no existiera, habría que crearla».