Se acabó la tregua. El ruido de las obras ha vuelto a brotar con fuerza en el entorno del complejo administrativo 9 d'Octubre, propiedad de la Generalitat Valenciana, por tercera vez en tan solo unos meses. Durante el pasado mes de agosto se llevó a cabo la apertura de una cámara telefónica y se realizó la canalización eléctrica bajo la calzada, lo que obligó a levantar parte del pavimento, con las consiguientes molestias para los vecinos. Lo mismo sucedió un poco antes, en marzo, cuando las obras de urbanización que requería la inauguración del nuevo edificio del Gobierno autonómico forzó a que se cortara un carril de circulación de la vía a lo largo de varias semanas. Ahora, unas semanas después, las obras han regresado por tercera vez al 9 d'Octubre.

En esta ocasión, la empresa Restitubo ha abierto una zanja en la mediana de la calzada, frente a la entrada principal del complejo, con el propósito de acometer una serie de perforaciones que permitirán la instalación de dos largos tubos, de 710 milímetros de diámetro cada uno. Estas tuberías darán cobijo a un entramado de cables eléctricos que sellarán la unión de la nueva subestación eléctrica del Parque de Cabecera con la línea subterránea de doce kilómetros que enlaza la planta de Beniferri con la de la Fuente de San Luís, muy próxima al nuevo Hospital la Fe.

Por tanto, se trata de la colocación bajo tierra de una línea de cables de transporte secundario de energía eléctrica a 220 Kv. de doble circuito, esto es, de entrada y de salida, con una longitud de 3,5 kilómetros y cuya inversión prevista por Red Eléctrica Española, a cargo de la obra, es de 12,5 millones de euros.

Una obra "muy compleja"

Por otro lado, los trabajos también se han trasladado hasta el viejo cauce del río Túria, justo en la parte que se halla debajo de la pasarela del puente 9 d'Octubre, diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava. Dos perforadoras de gran tonelaje excavan en el terreno de este área verde, en la que se han ubicado varios contenedores de gran volumen para la recogida de arena y agua derivada de los quehaceres de los operarios.

En este apartado, se pretende abrir un pequeño túnel que deje pasar los tubos desde la calle 9 d'Octubre hasta la subestación del Parque de Cabecera, todo ello por debajo del viejo cauce. La intención de este plan es evitar que se tenga que cortar el tráfico del Paseo de la Petxina mientras duran las obras.

Según los responsables de la empresa, es un trabajo "muy complejo", ya que se trata de una perforación "dirigida", lo que significa que el túnel debe dibujar una ligera curva que favorezca el paso de los cables por debajo del paseo de la Petxina, hasta emerger en la calle 9 d'Octubre. La obra estará completada dentro de dos meses.

El pasado año, la Generalitat dio autorización para la subestación eléctrica del Parque de Cabecera, soterrada bajo la rotonda en las afluencias de las avenidas Pío Baroja, General Avilés y Bulevar Norte. Según Red Eléctrica, se espera que la subestación empiece a funcionar a finales de 2014, cuando se activará este empalme eléctrico.