La Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente requirió el mes pasado al Ayuntamiento de Valencia para que remitiese nuevos informes sobre el impacto visual de las nuevas edificaciones previstas en la marina real Juan Carlos I, en concreto, sobre el hotel de hasta 30 alturas proyectado junto a la antigua estación marítima y sobre los antiguos Docks comerciales, edificio al que se ha asignado también uso hotelero y al que se podrán añadirá hasta tres alturas más.
La conselleria solicitó una decena más de figuraciones con simulaciones desde puntos estratégicos como la plaza de la Armada Española, el hotel Neptuno, la calle Juan Verdeguer, la avenida del puerto y el pantalán de los megayates de la marina con objeto de comprobar la afección de las nuevas edificaciones sobre el entorno de la dársena. La celebración de la Copa del América y la construcción de las bases deportivas ha alterado considerablemente la perspectiva de la dársena histórica quitando protagonismo y visibilidad a los edificios protegidos como los tinglados modernistas, el varadero y el edificio del Reloj.
El ayuntamiento remitió la documentación requerida por Territorio y Medio Ambiente el 28 de marzo pasado. En la misma se aportan nuevas figuraciones que de las distintas versiones del hotel desde varios puntos de vista. Se trata de la torre de hasta 30 alturas de forma circular y mínima ocupación de suelo; la torre de menor altura sobre plataforma; y las tres torres iguales que reducen altura pero suponen una ocupación máxima de la parcela.
La información complementaria sobre el impacto visual del hotel fue requerida la Dirección General de Evaluación Ambiental con carácter previo a la emisión del informe sobre el estudio de integración paisajística del plan especial de la marina real que tramita el Ayuntamiento de Valencia. Dicho plan fija los usos y aprovechamientos „fundamentalmente terciarios„ previstos en la dársena cedida por el puerto a la ciudad hace ahora un año.
La Dirección General de Evaluación Ambiental puso «varios reparos» al plan especial referentes a la necesidad de completar el análisis visual y de concretar los elementos de la infraestructura verde. La conselleria echaba en falta mayor concreción del denominado «bosque mediterráneo» proyectado en la marina sur, en terrenos portuarios. El equipo redactor del plan especial, encabezado por el arquitecto José María Lozano, ha justificado la falta de concreción en que se trata de un suelo portuario sujeto a una concesión al Consorcio Valencia 2007 a 35 años y cuya ordenación no compromete al puerto. Estos terrenos están sujetos al plan de usos de la APV que está en tramitación y que no se espera que el Ministerio de Fomento apruebe antes del verano.
El plan especial de la marina real, que ya ha superado la fase de exposición al público, ha sido informado por más de 30 servicios de distintas administraciones, entre ellos, las consellerias de Educación y Sanidad que descartaron la necesidad de reservar suelo para dotaciones educativas o sanitarias dado que en el «nuevo barrio» no está previsto construir viviendas.
El Ayuntamiento de Valencia confía en que esta semana la comisión territorial de Urbanismo de luz verde al plan especial de la marina en la parte de suelo patrimonial. De este modo el Consorcio Valencia 2007 podría empezar a conceder licencias para dinamizar la dársena, donde está previsto, entre otros, un centro de formación y creación de nuevas empresas impulsado por el empresario Juan Roig en las bases deportivas.
El nuevo hotel pensado como hito en altura en la marina real es uno de los proyectos incluidos en el «dossier» que el ayuntamiento ha remitido al Gobierno para promocionar en los países árabes las posibilidades de arrendamientos y concesiones en la dársena. Las inversiones más ambiciosas serían, por cuantía económica, la concesión de la zona náutico-industrial y el gran hotel de 30 plantas, aunque también habría interés en desarrollar el uso hotelero de los antiguos Docks.
