La comisión de Urbanismo dio ayer el visto bueno a la suspensión de licencias en el ámbito afectado por el plan especial de protección de l'Eixample-Russafa-Gran Vía. Se trata de una medida paralela con la tramitación de la modificación del planeamiento que tramita el ayuntamiento para establecer limitaciones a los locales de ocio.
Con esta medida se pretende evitar que durante el proceso de tramitación se pudieran abrir nuevos locales que tras la aplicación de las restricciones quedasen en situación irregular.
La Comisión de Urbanismo aprobó el pasado mes de mayo someter a información pública la modificación del plan de protección de l'Eixample con el objetivo de regular la implantación de nuevas actividades recreativas y establecimientos públicos en la zona. Con la modificación del planeamiento el ayuntamiento quiere poner coto a la proliferación excesiva de locales de ocio, bares y terrazas en Russafa, evitando en lo posible el riesgo de una nueva Zona Acústicamente Saturada (ZAS) como las de Xúquer, Juan Llorens, Menéndez Pidal y el Carmen.
La modificación del planeamiento fija que los locales sin ambientación musical (bares y restaurantes) deberán mantener una distancia de separación de 65 metros. La distancia aumenta al doble en el caso de locales con ambientación musical.
Por otro lado la comisión de Hacienda de hoy aprobará la nueva ordenanza de ocupación de vía pública que regula, entre otras, las terrazas de los locales de ocio y la música en la calle.
