La Plataforma pel Comerç Valencià mantuvo ayer una reunión con el conseller de Economía, Industria, Turismo y Empleo, Máximo Buch, para plantearle sus reivindicaciones en materia de horarios y de instalación de nuevas grandes superficies. Esta plataforma, que agrupa a asociaciones de comerciantes de toda la provincia, y especialmente de Valencia y l'Horta, ha llevado a cabo en los últimos meses dos intensas movilizaciones. Por un lado, pretenden que el Consell anule la declaración de cuatro zonas de afluencia turística en la ciudad de Valencia que permite a las grandes superficies implantadas allí abrir todos los domingos y festivos hasta la fecha sólo podían vender doce días y que no autorice más de estas áreas.
Por otro, los comercios han promovido una campaña de alegaciones contra el futuro centro Puerto Mediterráneo que proyecta el Ayuntamiento de Paterna.
En la reunión de ayer, los comercios recriminaron a Buch que hubiera autorizado las cuatro áreas en Valencia porque ha supuesto «romper el consenso hasta ahora con todos los sectores del comercio, que fijó el doce los festivos abiertos». Además, le insistieron que en la actual coyuntura económica de grave crisis con un índice de paro tan elevado, la única salida para muchas personas es el autoempleo a través de un pequeño comercio, que montan acogiéndose al pago único del paro y «el Consell con sus políticas los está condenando al fracaso» dado que «se montan negocios y desaparecen en pocos meses.
En este punto, al directora general de Comercio, Silvia Ordiñaga, que estaba presente, opinó que algunos emprendedores inician negocios sin estar preparados.
Los representantes de la plataforma explicaron ayer tras la reunión que el conseller les indicó que «Rita Barberà quería cuatro áreas en Valencia» y que, con la ley estatal en la mano, no pudieron denegarlas. No obstante, Buch anunció que el Consell prepara la normativa autonómica que desarrollará esa ley estatal y, a priori, la intención es limitar el acceso a esa declaración de zonas turísticas, por medio de la imposición de más requisitos. Además, se comprometió a consensuar la ley con el Observatori Valencià del Comerç, en el que están representadas las pequeñas asociaciones.
Desde la plataforma se elogió el «tono cordial» de la reunión, aunque se lamentó que no hubiera un compromiso mayor, porque la apertura en domingos y festivos ha supuesto una pérdida de cuota de mercado del 15% a los pequeños negocios.
