Rita Barberá recordó que el 52% de las víctimas de accidentes de circulación se produce en ciudad, lo que significa que hay que trabajar en este terreno mejorando la colaboración de las instituciones, como era el caso.

De entrada, este convenio permitirá intercambiar información entre el consistorio y la DGT para tener todos los datos de sanciones, de campañas o de vehículos y también para facilitar el trabajo a los vecinos. «Si una persona viene a vivir a Valencia se empadrona y automáticamente ya le cambian el coche de domicilio etc. Así sólo tiene que hacer una gestión», precisó la alcaldesa.

Por otro lado, el convenio permitirá a la Dirección General de Tráfico facilitar al ayuntamiento medios materiales para llevar a cabo campañas de control. Le aportará, por ejemplo, vehículos, test de alcoholemia y drogas, radares para el control de la velocidad etc.

Rita Barberá aprovechó también para recordar algunas medidas que se están tomando en este campo, como las calles 30 que se implantarán en Russafa y el barrio de San José.