El grupo socialista en el Ayuntamiento de Valencia presentará enmiendas a los presupuestos municipales de 2015 por valor de 27 millones de euros. Su propósito es «enderezar el rumbo» de unas cuentas que «no responden a la realidad» y en previsión de llegar al Gobierno a partir del próximo mes de mayo. Ese dinero se destinaría básicamente a empleo, servicios sociales e inversiones y se obtendría casi en su totalidad de cobrar a las constructoras el dinero que deben al consistorio por todos los PAIs puestos en marcha en los últimos años.

Según explicaron el portavoz socialista, Joan Calabuig, y el concejal Pedro M. Sánchez, los presupuestos municipales aprobados en el último pleno con el apoyo exclusivo del PP son «continuistas» y «no afrontan la nueva realidad social, ni la situación de los 95.000 parados, ni la de las 30.000 familias que no tienen ingresos, ni del tercio de niños que hay por debajo del umbral de la pobreza».

Sus reclamaciones, por tanto, tienen como objetivo «cambiar el rumbo» de esas cuentas y además hacerlos más acordes con su filosofía para el caso de que gobiernen el Ayuntamiento de Valencia a partir del próximo mes de mayo, cuando se celebrarán las elecciones municipales.

En este sentido, Calabuig, anunció que si consigue formar gobierno, en el año 2016 hará un presupuesto «cero», es decir, unas cuentas completamente nuevas revisando cada una de las partidas actuales.

En términos globales, los 27 millones que reclama el grupo socialista irán destinados a tres grandes partidas: empleo, servicios sociales e inversiones. A la primera destinaría 5 millones, lo que supone doblar lo presupuestado actualmente; otros 4 millones irían para los servicios sociales y más concretamente para ayudas de emergencia; y para inversiones y mejora de los servicios públicos se destinaría el resto, con planes de rehabilitación de vivienda para los barrios del Cabanyal, Russafa y Ciutat Vella, así como planes de vivienda social y un claro aumento de las partidas de limpieza y Jardines.

También habría un apartado para Cultura, entre otras cosas para la Feria del Libro y para recuperar la desaparecida Mostra de Cinema del Mediterrani.

Para pagar estos servicios, los socialistas también han presentado una batería de medidas que permitirían recaudar esos 27 millones, más de 18 provenientes de la deuda de las grandes constructoras con el consistorio.

Sólo de los agentes urbanizadores responsables de los PAIs de Patraix, Camino Hondo del Grao y Quatre Carreres podrían recuperar 15 millones de euros, a los que habría que sumar los 3,1 millones de Malilla.

Asimismo, se procedería a la venta de viviendas municipales y aparcamientos construidos en el subsuelo público y se anularían partidas de gastos previstas por el PP como los 700.000 euros destinados a comprar casas en el Cabanyal para derribarlas o la subvención de 239.638 euros del Palau de les Arts, responsabilidad de la Generalitat Valenciana.