La asociación Valencia Cultural-Vía Augusta y Camino de San Vicente Mártir dio a conocer ayer el logo que se utilizará para señalar el camino del santo, que recorrerá los 400 kilómetros que separan Huesca de Valencia y que empezará a señalizarse, si humana y económicamente es posible, la próxima primavera.

El logo, que ya ha sido registrado en la Oficina Española de Patentes y Marcas, es completamente azul y refleja básicamente la silueta del diácono con el aspa en la que sufrió martirio. Esta imagen estará en todas las señales del camino, en la credencial de ruta y optativamente en los sellos que se coloquen al final de cada etapa. Es, de hecho, el primer paso para oficializar e iniciar un camino que lleva años gestándose y que ahora experimenta un impulso definitivo.

Según explicó Francisca Llosa, presidenta de la asociación, ya existe un trazado coherente entre Huesca, lugar de nacimiento de San Vicente Mártir, y Valencia, lugar donde murió y permanece enterrado, concretamente bajo el monasterio de San Vicente de la Roqueta.

Se trata de 400 kilómetros a través de cinco provincias y más de 60 lugares los que pasó el mártir tras ser apresado en Zaragoza con el obispo San Valero y trasladado a la capital del Turia para ser juzgado y condenado. En este itinerario hay lugares donde el diácono y el obispo descansaron, fueron recluidos o hicieron milagros. Y la idea es señalizar un camino, alejado de carreteras y autovías, que esté dividido en varias etapas a final de las cuales pueda sellarse la correspondiente credencial de ruta.

La previsión, ya con el logo registrado, es hacer ese trabajo de señalización esta primavera, empezando por Huesca y avanzando progresivamente hasta Valencia. La idea inicial era haber realizado esa labor el pasado otoño, pero el frío que por esas fechas hace en el interior, así como problemas personales de quien iba a hacer el trabajo, aconsejaron dejarlo para esta primavera.

Ayer precisamente, la asociación Valencia Cultural-Vía Augusta y Camino de San Vicente Mártir, entidad sin ánimo de lucro, hizo un llamamiento «a la sociedad valenciana y devotos en general» para que «ayuden con algún donativo» a financiar el rescate del camino, que es el más antiguo de España (San Vicente murió en el año 304). Su coste se estima en 18.000 euros.

Según Francisca Llosa, su asociación no ha pedido financiación al ayuntamiento, al que sí le han reclamado la rehabilitación del monasterio de San Vicente de la Roqueta para su conversión en centro vicentino. De hecho, éste debería ser el final del camino y por el mal estado del edificio tendrán que sellar la credencial en la contigua parroquia de Cristo Rey.