Ángel Canales sabe que, cuando vuelva el martes al cole, se va a llevar alguna que otra colleja. Con cariño, sí, pero sus compañeros en el CP Torrefiel le gastarán bromas al hilo de su pelo, cortado en tonsura como Sant Vicent Ferrer. «Decidí hacerlo yo mismo para representar más fielmente al santo», explica Ángel.
Sabe de qué habla. Participó en el Miracle que hace siete años empezó la racha triunfal del Altar del Tossal y este año, por fin, ha podido ser el santo. «Siete primeros y un segundo», como apunta orgulloso. Ángel no se ha llevado ningún premio de actor pero asegura que la victoria de su altar es premio suficiente.
